Cada semana desaparecen o mueren aproximadamente 11 niños intentando cruzar el mar Mediterráneo para llegar a costas europeas desde el norte de África, según denunció este viernes 14 de julio el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
De acuerdo con el organismo, al menos 289 menores han muerto o desaparecido intentando realizar esta travesía durante 2023. Sin embargo, desde 2018 estima un total de 1,500 infantes muertos o desaparecidos al intentar cruzar el mar Mediterráneo central.
Esta cifra representa una quinta parte del total de 8,274 personas que se perdieron en esta ruta durante los últimos cinco años, conforme a los registros del Proyecto de Migrantes Desaparecidos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
No obstante, Unicef indicó en que muchos de los naufragios terminan en la muerte de todas las personas a bordo o simplemente no se registran. Por ello, advirtió de que el número real de víctimas infantiles es prácticamente imposible de verificar y probablemente sea mayor.
En esa vía, durante los últimos meses, apuntó, numerosos niños, niñas y bebés perdieron la vida en esta odisea, en otras rutas que cruzan el Mediterráneo y en la travesía atlántica desde África Occidental. Esto incluye las recientes tragedias ocurridas frente a las costas de Grecia y las Islas Canarias españolas.
“En un intento por encontrar seguridad, reunirse con la familia y buscar un futuro más esperanzador, un gran número de menores se embarcan en las costas del mar Mediterráneo solo para perder la vida o desaparecer en el camino”, dijo Catherine Russell, directora ejecutiva de Unicef.
MÁS DE 3,000 NIÑOS CRUZAN EL MAR MEDITERRÁNEO SIN ACOMPAÑANTES
Esta es una señal, aclaró Russell, de que se deben tomar más medidas a fin de establecer vías seguras y legales para que los niños accedan a servicios de asilo. “Al tiempo que se refuerzan las operaciones para rescatar vidas en el mar (…) En última instancia, hay que hacer mucho más para abordar las causas profundas que fuerzan a los niños de arriesgar sus vidas en primer lugar”.
Según los cálculos de Unicef, 11,600 infantes han llegado a costas de Italia desde enero de 2023; una cifra que supone una media de 428 niños a la semana, que es más del doble que la registrada en el mismo periodo de 2022. La mayoría de ellos parten de Libia y Túnez, luego de ejecutar peligrosos viajes desde otros países de África y Oriente.
Además, durante el primer trimestre del año, registró a 3,300 niños como no acompañados o separados de sus progenitores o tutores legales —71 por ciento del total llegado a Europa —. Esta situación los expone a un mayor riesgo de violencia, explotación y abusos, casos aún peor en niñas, quienes enfrentan más peligros de sufrir violencia antes, durante y después del viaje.
“Si bien el mar Mediterráneo central se convirtió e una de las rutas más peligrosas para la infancia, el riesgo de muerte durante la travesía en solo uno de los cuantiosos riesgos a los que se enfrentan, ya que también están expuesto a amenazas o actos de violencia, falta de oportunidades educativas o de futuro, redadas y detención de migrantes o separación de sus familias”, agregó el organismo de la ONU.
UNICEF EXHORTA A LOS GOBIERNOS A PROTEGER MEJOR A LOS MENORES
Por esta razón, Unicef lamentó que la escasez de vías que tienen los niños para desplazarse con seguridad en el mar Mediterráneo, la falta de acceso a la protección en los países por los que transitan y la insuficiencia y lentitud de las operaciones de búsqueda y rescate agravan estos riesgos. Ante ello, exhortó a los gobiernos a proteger mejor a los niños y niñas en el mar y en los países de origen tránsito y destino.
Out of desperation, children board boats on the Mediterranean, only to lose their lives.
More must be done to create legal ways for children to access asylum, strengthen rescues at sea, and address root causes that make children risk their lives. https://t.co/lrKRVPVviO
— Catherine Russell (@unicefchief) July 14, 2023
Entre las medidas reclamadas figuran la protección de los derechos y el interés superior del menor, en línea con las obligaciones derivadas de las legislaciones a nivel nacional e internacional. También el garantizar vías seguras y legales para que los infantes migren y pidan asilo, incluida la ampliación de los casos de reunificación familiar y de la cuota de reasentamiento de refugiados. Finalmente, está el reforzar la coordinación de las operaciones de búsqueda y salvamento, así como garantizar un rápido desembarco en lugares seguros.
Aunado a lo anterior, Unicef solicitó reforzar los sistemas nacionales de protección de la infancia para incluir y proteger mejor a los menores en riesgo de la explotación y violencia. En particular, a los no acompañados, y mejorar las perspectivas de los niños en los países de origen y tránsito abordando los conflictos y riesgos climáticos. Además de ampliar la cobertura de la protección social y las oportunidades de aprender y ganar dinero. N