Daniela Morales / NW Durango
La sequía es un fenómeno meteorológico recurrente en México, que se presenta con mayor intensidad en los estados del centro y norte. Debido al cambio climático, este fenómeno se ha intensificado en los últimos años, provocando episodios graves de sequía en 2011 y 2021.
La baja precipitación genera escasez de agua y sus impactos no se limitan únicamente al medio ambiente, sino a sectores como salud, desarrollo social, economía y bienestar de la población. La sequía es el evento natural más costoso y que afecta a más personas en todo el mundo. A diferencia de sucesos como sismos, inundaciones, huracanes o ciclones, el daño que provocan las sequías tiene efectos acumulativos en los años subsecuentes, principalmente en el sector agrícola y la población rural.
Las actividades agrícolas son el sector que absorbe la mayor cantidad de impactos provocados por la sequía. La dependencia de la economía del estado de Durango al sector primario, pone de manifiesto la vulnerabilidad de la entidad ante la recurrencia de periodos extensos de sequía. Banco de México estima que, si las sequías se prolongan, pueden tener un efecto en la producción desde la local o regional hasta la nacional; además, estima que los factores climatológicos como la sequía, al igual que la inflación mundial y los choques internacionales, están considerados de alto riesgo en 2021 y 2022 como factores que presionan la inflación en México.
Con información a mayo de 2023, el 97.7% del territorio estatal se encuentra en sequía severa o moderada, mientras que en 36 municipios se presenta sequía severa.
Con este informe, Inevap busca contribuir, a través de información y evidencia oportuna, a fortalecer los programas orientados a minimizar los impactos de la sequía en Durango.