DE TIEMPO Y CIRCUNSTANCIAS
París amanece frío y eso resulta benéfico, pues la capital de Francia es hoy un muladar. Los recolectores de basura de la Ciudad de la Luz están en huelga desde el 5 de marzo. El 17 de marzo, la alcaldía calculó en más de 10,000 toneladas de basura amontonadas en las calles. Los parisinos riegan con agua helada los montones de basura. De modo que el frío, en algo, amortigua la pestilencia.
La gente está acostumbrada a las huelgas y no hace aspavientos. Ven la situación y se adaptan. George vive en la avenida de Suffren y por las tardes acostumbra a sentarse a leer en una banca entre el bullicio de la ciudad. Día con día lee, solo que ahora lo hace junto a un montículo de basura sin inmutarse.
La huelga estalló en protesta al cambio en la ley de retiro, que ha retrasado dos años la edad de jubilación en Francia. El presidente francés, Emmanuel Macron, en un discurso televisado explicó la posición del gobierno y dijo que, de no hacer el cambio, el sistema de pensiones se encaminaba a producir un boquete en las finanzas de Francia y esto no se podría permitir.
El periodista Emmanuel Bailly, en un reportaje para France Info, entrevistó a los empleados de limpia en huelga. Marie, una recolectora que siguió con atención el discurso de Macron, no oculta su desencanto. Tiene 50 años, y si la edad de retiro se desplaza dos años, podrá retirarse hasta los 59 años en lugar de a los 57, que es la edad que le correspondía con la ley anterior.
POSTURAS EN EL MISMO EJE
Su labor la somete a faenas de trabajo agotadoras, pero la ilusionaba el hecho de que en siete años podría retirarse. Ahora serán nueve y no está dispuesta a soportar dos años de más.
Laurent, un profesor de lengua francesa al que entrevisté, dijo: “Mira, en este país los obreros como Marie se mueren, en promedio, cinco años antes de la edad de retiro. Mientras, los empleados administrativos mueren 15 años después de retirarse. Además, lo que dice Macron de que el dinero no alcanza se puede solucionar fácilmente si a los ricos les subieran 1 por ciento los impuestos”.
El hecho de que los números de Laurent se ajusten a la realidad o no resulta irrelevante, pues los dos relatos, tanto el de Marie como el de Laurent, giran en torno a los mismos ejes, y el pensamiento de la gran mayoría de los franceses también.
Conforme el movimiento cobra fuerza, atrae organizaciones. Ahora se han sumado los controladores aéreos, que están cerrando aeropuertos, el de Orly canceló todos los vuelos el 24 de marzo, y los empleados ferroviarios, los del metro, los empleados de las gasolineras, los bomberos y un sinnúmero de oficios se han sumado a las protestas paralizando a Francia.
CRONOLOGÍA DE UN MOVIMIENTO
Todo comenzó el 8 de enero con el anuncio del proyecto de cambios a la ley de pensiones. La edad del retiro subiría de 62 a 64 años. Para el 10 de enero, ocho sindicatos anunciaron su rechazo al proyecto de ley de reforma y anunciaron protestas. La reforma siguió su curso.
—12 de enero: el proyecto pasó al Consejo de Estado.
—19 de enero: fue la primera jornada de manifestaciones masivas y se anunció otra jornada de protestas para el 31 de enero.
—26 de enero, la primera ministra francesa, Elisabeth Borne, declaró que la edad de retiro a los 64 años no era negociable.
—31 de enero: hubo otra jornada masiva de manifestaciones y huelgas.
—7 de febrero: tercera jornada de manifestaciones y huelgas.
—11 de febrero: cuarta jornada masiva de manifestaciones en la que se cuentan cerca de un millón y medio de manifestantes en las diferentes concentraciones.
—14 de febrero: la asamblea rechaza y hace modificaciones al proyecto de ley.
—16 de febrero: quinta jornada de manifestaciones y huelgas.
—7 de marzo: sexta jornada de manifestaciones y huelgas.
—8 de marzo: los paros se convierten en huelgas permanentes en algunos sectores de transporte, de energía y de empleados de sanidad y limpia de París.
—9 de marzo: el presidente francés, en lo que puede ser el error más grave de este episodio, se niega a recibir a la representación intersindical.
—16 de marzo: el Senado da un voto positivo a la ley y se decide publicar la ley sin más trámites conciliatorios. Las protestas escalan y se suman grupos a la huelga.
—24 de marzo: Carlos III cancela, por petición expresa de Macron, su viaje a París.
—27 de marzo: la primera ministra francesa ofrece, a destiempo, dialogar con la oposición. Se abre la puerta para llevar el conflicto a término.
MÁS PROMEDIO DE VIDA
La ley obedece a un problema global. La ciencia ha logrado que la población mundial aumente su expectativa de vida a razón de un año cada cinco, y si bien la pandemia tuvo un efecto disruptor en este aumento, los indicadores hacen suponer que la tendencia continuará.
Esto lleva a que cada vez haya más personas cobrando una pensión sin trabajar y las cuentas financieras dedicadas a las pensiones amenazan con agotar los capitales.
Emanuel Macron, el presidente de Francia, alega que el elevar la edad de retiro de 62 a 64 años es esencial para que el sistema sea sostenible. Y ante la presión financiera decidió que era momento de actuar antes de que fuera demasiado tarde e impuso por decreto una reforma de pensiones. Consecuentemente, Francia ha estallado en huelgas.
Pero mi abuelo decía: “Lo importante no es que tengas la razón, sino que te la quieran dar”. El grave error fue negarse a escuchar a los sindicatos para luego negociar con ellos. Porque eso es lo que se hace en un país democrático, y el gobierno de Macron, al negarse, se dio un balazo en el pie.
FRANCIA Y LA DEMOCRACIA
La publicación The Economist califica el grado de democracia en los diferentes países. Esta le da a Francia una calificación de 7.99 en 2022, lo que la coloca en la frontera entre una democracia plena y una democracia deficiente. Francia era una democracia plena, pero retrocedido en este índice.
Un estudio de la Revista Española de Investigaciones Sociológicas (REIS) hecho por “Jesús M de Miguel y Santiago Martínez-Dordella” correlaciona los índices de calidad de vida de las poblaciones con el de grado de democracia. Encontró que, a mayor grado de democracia, mayor calidad de vida de la población.
Así, Francia es prácticamente una democracia plena, pero un gobierno demócrata que impone leyes sin consensuarlas arriesga la gobernabilidad. Eso es lo que está sucediendo en Francia y lo que obliga a la primera ministra a recular en el proceso. El gobierno abrió la puerta, quizá muy tarde, a la negociación. Macron ahora va a ver que negociar a destiempo hace que el caldo salga más caro que las albóndigas.
En este orden, México, dolorosamente, ha caído en el índice de democracia de una calificación, cercana al 7, de 6.93 en 2011, a 5.25 en 2022. De acuerdo con la investigación de REIS, conforme perdemos democracia nuestro índice de calidad de vida desciende correlativamente.
VAGÓN DE CABÚS
Los mercados empiezan a serenarse y las bolsas, a recuperarse. Tanto Estados Unidos como Europa reaccionaron con gran acierto a la crisis que amenazaba con desencadenarse y lograron contenerla. No todo ha terminado y aún hay desequilibrios en el sistema bancario. Sin embargo, lo peor parece haberse superado. N
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Salvador Casanova es historiador y físico. Su vida profesional abarca la docencia, los medios de comunicación y la televisión cultural. Es autor del libro La maravillosa historia del tiempo y sus circunstancias. Los puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad del autor.