En días pasados, los integrantes del cabildo del Ayuntamiento de Aguascalientes recibieron los resultados de la auditoría que se realizó sobre la empresa concesionaria del agua, Veolia. Dicha información reveló que existen más de 60 mil viviendas en la ciudad que no cuentan con un medidor de agua, dio a conocer el regidor Gustavo Granados Corzo.
Al término de la presentación del Plan Maestro del Agua 2023 por parte del alcalde Leonardo Montañez, el representante del partido Movimiento Ciudadano cuestionó en entrevista el modo en el que se estaban haciendo los cálculos para el cobro de las tarifas a la ciudadanía aún con la falta de medidores en los domicilios.
“Existen 360 mil cuentas de usuarios, de habitantes de Aguascalientes que pagamos el agua, pero casualmente quedó revelado en la auditoría que hay 63 mil viviendas que no tienen medidor, y yo me pregunto ¿cómo les cobran?, ¿cómo hacen este cálculo aproximado de habitantes que durante mucho tiempo han estado pagando y que quedó demostrado en la auditoría?”.
El edil resaltó que la misma auditoría detectó la participación de casi 10 empresas proveedoras de medidores de agua, y que algunos de esos aparatos fueron considerados “de dudosa procedencia”, lo que agravaría aún más el tema de la regulación y medición del líquido en los hogares.
Por otro lado, Granados Corzo comentó que uno de los indicadores positivos presentados por la empresa auditora Urban Group es que más del 80 por ciento de los usuarios del agua en la ciudad sí cumplen con sus pagos.
“Creo que sí hay muchas cifras, muchos datos importantes, un dato que hay que reconocer en la población de Aguascalientes es la eficiencia comercial, el 83 por ciento de la gente paga su servicio, es un porcentaje alto, hay un pago oportuno de los ciudadanos”.
Sin embargo, apuntó que existe una deuda equivalente a los 800 millones de pesos por parte de los ciudadanos, debido a los pagos atrasados por el servicio.
Finalmente, el regidor hizo un llamado a que se acelere el proceso de entrega-recepción, el cual, iría de la mano de despachos jurídicos, para tener una valoración contable final.