José Antonio Centeno Reyes asumió la presidencia de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) apenas hace un año, el 11 de marzo de 2022, y hoy 1 de marzo se elige a su relevo. La Canacintra es el organismo que representa al sector industrial de México y tiene como objetivo fomentar la competitividad y la productividad de las empresas, por lo que el presidente carga con una responsabilidad de proporciones inmensas.
Según algunos de los empresarios asociados a la Canacintra, a José Antonio Centeno lo caracteriza un carácter despótico y de falta de respeto a los liderazgos que los industriales han elegido a lo largo de los años. También se le acusa de manipular la interpretación de los estatutos y de perpetrar violencia política de género y nepotismo al considerar que su poder en el interior de la cámara se debe a él y no a un proceso democrático.
De acuerdo con investigaciones realizadas y testimonios de industriales recogidos por este medio, el presidente de la Canacintra se ha justificado en el hecho de que él redactó los estatutos que rigen la Cámara para perpetrar imposiciones de forma consistente desde el inicio de su administración.
Por ejemplo, se nombró a Sergio Martín Esquivel, al inicio de la gestión de Centeno, como vicepresidente nacional de Integridad y Cumplimiento Normativo, con lo cual pretendió aportar a la institución un código de ética, cumplimiento normativo e integridad corporativa.
Sin embargo, fuentes consultadas revelan que Centeno no cumplió con lo que marcan los estatutos y se caracterizó por despreciar el talento de los industriales que llevan años defendiendo causas y logrando espacios de trabajo y comunicación.
VIOLACIÓN DE LOS ESTATUTOS
El primer requisito para ser vicepresidente nacional, según marcan los estatutos, es “ser o haber sido consejero nacional”, lo cual Martín Esquivel no cumplió al no aparecer en ninguna de las actas de Asamblea. Y luego, tras su nombramiento, impuso un código de ética que no revisó la Comisión de Organización y presupuesto de la Canacintra (artículo 108) ni lo llevó al Consejo Directivo y posterior ratificación de la Asamblea como ordena el procedimiento.
A ello se suma, con base en documentos y declaraciones de los socios, el desarrollo de un reglamento de comités, comisiones y representaciones que tampoco pasó por la comisión citada en el párrafo anterior. Y el nombramiento de Leonor Quiroz Carrillo como vicepresidenta de Equidad e Inclusión. De nueva cuenta, se trata de una persona que no era consejera, pero la justificación fue que, que al trabajar en Pepsico, y este al ser socio de la cámara, tenía el derecho de ser nombrada, cuando cada empresa elige al representante que envía a la Canacintra.
Por último, el presidente desestimó lo que la Comisión de Organización y Presupuesto le solicitó durante los últimos meses de su gestión. Según los industriales, lo más grave fue que Centeno intentó violentar el artículo 24 referente a las facultades de la Asamblea General, órgano máximo de la Canacintra, al cambiar el auditor externo del órgano camaral sin autorización de la Asamblea ni aviso al Consejo Directivo.
ABUSO DE PODER EN CANACINTRA
La administración de Centeno deja huella por el uso de poder para colocar a personas de su esfera personal a cobrar como asesores en su administración, declara uno de los asociados consultados. También, agrega, por utilizar su influencia para imponer altos sueldos a sus familiares políticos en la asociación civil que lidera Raúl Rodríguez Márquez, vinculada con la Canacintra, y ocultar información de viáticos, gastos de oficina de la presidencia bajo la justificación de sanear las finanzas del órgano industrial.
Con facturas bajo el concepto de “Asesoría a Presidencia Nacional”, la que ahora se conoce, por sus declaraciones en el Consejo Directivo Nacional de diciembre pasado, es pareja sentimental de José Antonio Centeno, cobró durante casi cuatro meses alrededor de 46,000 pesos.
Posteriormente, para evitar un conflicto de interés, fue nombrada directora de Enlace Legislativo de la asociación civil llamada Comisión de Enlace Legislativo, A. C. Dicha persona moral es manejada por el presidente de la Comisión de Canacintra, Raúl Rodríguez Márquez, quien fue nombrado por el propio José Antonio Centeno.
Raúl Rodríguez Márquez es excabildero de Grupo Modelo y contendió por la Presidencia de la Concamin contra Salomón Pressburguer en 2009; posteriormente fue candidato con las siglas del PRI al Senado de la República por el estado de Zacatecas, en 2018. Actualmente está contratado por la trasnacional de alimentos Ingredion.
FAMILIARES POLÍTICOS BENEFICIADOS
Las aportaciones a la Comisión de Enlace Legislativo, A. C. son hechas principalmente por grandes empresas de los sectores de alimentos, bebidas y tabaco, entre las que se encuentran Bimbo, Yakult, Sigma Alimentos, Lala, Metco, Ingredion, Pepsi, GEP, British American Tobacco, Japan Tabaco y Philip Morris, así como de empresas de otros sectores industriales como Grupo Allen, American Tower, Caterpillar, Abbott y Red Ambiental.
En la nómina de dicha organización no aparece como director general. Sin embargo, otro familiar político de Centeno aparece con el sueldo más alto en el interior de dicha comisión, con 94,755.78 pesos mensuales (47,377.89 pesos quincenales).
A ello se le suman numerosos cuestionamientos de viáticos, ascensos a clase premier y viajes internacionales, de los cuales no había preparada la información financiera al momento de revisarla por la Comisión de Organización y Presupuesto. Además, se presentaron inconsistencias en la depreciación de bienes de la institución para su presentación en Asamblea Nacional.
De acuerdo con industriales consultados, ante este clima de inconformidad, al cual se suma la violencia política de género en el interior del organismo, Centeno ahora prefiere “quemar” la Canacintra al no encontrar condiciones para su reelección para un segundo año. Después de anunciar en enero pasado que no participaría en el proceso de elección, quedaron tres candidatos registrados el 31 de enero.
LOS INDUSTRIALES SE DEFIENDEN
José Luis Vega López, secretario nacional de Canacintra hasta el término del proceso electoral de este 1 de marzo, emitió tres constancias de registro. Fue confirmado por él en grupos de la aplicación WhatsApp, a los miembros de la mesa directiva de Centeno.
Tras otorgar registro a María de Lourdes Medina Ortega (quien había renunciado por violencia política de género), Esperanza Ortega Azar (prosecretaria nacional de la mesa directiva de Centeno) y José Manuel Sánchez Carranco (el vicepresidente que no fue tomado en cuenta y confrontó a Centeno en Mérida, Yucatán), admitió a trámite y proceso de revocación, derivado de su propio análisis jurídico, pese a que es una facultad estatutaria, y sin justificación de origen en los estatutos, la candidatura de las dos mujeres contendientes. Ortega Azar es la puntera en las preferencias en el interior del organismo.
Según testimonios recogidos, ayer más de 70 consejeros nacionales se reunieron para votar por la revocación de las facultades de interpretación de los estatutos del organismo y defender la contienda electoral en la Canacintra.
Hoy se realiza la Asamblea Nacional Ordinaria del instituto. A estas instalaciones han llegado escritos de casi el 70 por ciento de los asambleístas de Canacintra indicando que no permitirán atropellos a su proceso democrático.
SIEMPRE RESPETARÉ LA LEGALIDAD: CENTENO
Consultado por este medio, José Antonio Centeno responde que se considera una persona que respeta la legalidad y que decidió no contender por un segundo mandato frente a la Canacintra porque “no tengo obsesión por el cargo”.
—Dentro de los rubros de gastos de la presidencia nacional de la Canacintra, ha habido cuestionamientos de socios que dicen que se oculta información a la Comisión de Organización y Presupuesto y que, además, la que presenta no está desglosada. ¿Qué dice al respecto?
—La Comisión de Organización y Presupuesto en mi administración tuvo el acierto de tomarse su papel más en serio de lo que venía siendo en otras administraciones en las que solo se levantaba la mano. Celebro que en esta administración hayan atendido el llamado que les hice en la primera sesión en la que los exhorté a cuestionar todo lo que se les presentara, que no se quedaran con dudas y que no validaran lo que no conocían con certeza.
“Esto trae cambios y ajustes necesarios en la dinámica en la que sesiona la comisión, y por tal motivo algunos de los requerimientos que hacían en las sesiones no se tenían preparados en el momento. El tesorero conjuntamente con los colaboradores de administración se daba a la tarea de preparar la información y entregarla en la nueva forma solicitada; fue, pues, una adaptación de los procesos a la nueva realidad de rendición de cuentas que ofrecí y que antes no existía”.
CULTURA DE LA LEGALIDAD
—Varias voces lo han acusado de autoritario al no respetar los órganos democráticos de la Canacintra, ¿nos puede dar su posición al respecto?
—Las voces que acusan sin pruebas son difamadoras. Yo siempre respeté y respetaré la legalidad en todas las esferas de mi vida personal y profesional, quienes me conocen pueden dar fe de ello. Quienes por intereses personales emiten acusaciones sin sustento tratando de obtener ganancia política cometen un acto de injusticia.
“Gracias a mi formación de abogado, tengo impregnada la cultura de la legalidad. Gracias a esa preparación tuve la oportunidad de aportar a la creación de los estatutos vigentes de Canacintra, incorporando a los mismos, medios de defensa, procedimientos para garantizar el ejercicio de los derechos democráticos de los afiliados, todo ello orientado a generar certeza jurídica y piso parejo”.
—En las reuniones de Consejo Directivo, la mayoría de los consejeros presentes no han aceptado sus resultados. ¿Por qué no tomó un rumbo diferente ante la voz en contra de su Consejo Directivo?
—En mi administración sesionó el Consejo Directivo Nacional en seis ocasiones, como mandatan los estatutos. En todas se aprobaron mis informes de actividades de manera unánime, de manera que no comparto la afirmación de que la mayoría de los consejeros presentes no aceptaron mis resultados.
“EL PRESIDENTE QUE LLEGÓ A SERVIR”
—Es cuestionado por sus delegaciones y ramas ante la falta de interlocución con el gobierno, no hay reporte de acuerdo o logro alguno de forma pública. ¿No existen o es información reservada?
—En un año de gestión, me reuní junto con mi equipo con 12 secretarios y secretarias de Estado del Gobierno Federal, con más de 30 legisladores federales, con 12 gobernadores y gobernadoras, y un sinnúmero de reuniones más con secretarios de los distintos ramos de los estados y de la Ciudad de México, así como con subsecretarios y directores generales. De todo ello di cuenta a mi Consejo.
—¿Cuáles han sido los principales cuestionamientos de la Comisión de Organización y Presupuesto que derivaron en el voto de no confianza de su Consejo Directivo?
—La Comisión de Organización y Presupuesto aprobó de forma unánime los estados financieros y de resultados del ejercicio completo que se presenta ante la Asamblea General Ordinaria.
“TENGO OTROS OBJETIVOS”
—Se le identifica como el presidente de Canacintra que no respeta los órganos democráticos de la Cámara. ¿Cuál es su posición?
—Considero que esa afirmación es poco objetiva. En realidad, muchos afiliados me identifican, y así lo han expresado, como el presidente que llegó a servir, a poner orden, a transparentar la casa, a renovar cuadros de representación, a trabajar en los temas que nos ocupan a las empresas y no a jugar al aspirante a político.
—Usted es el primer presidente que deja de serlo con tan solo un año de ostentar el cargo. ¿Qué nos dice al respecto?
—Que la Ley de Cámaras establece que el periodo para presidente de una Cámara es por un año, yo asumí ese compromiso y lo cumplí, no tengo obsesión por el cargo. Este no me define como persona, tengo otros objetivos y metas profesionales y personales que cumplir, por eso tomo la decisión de no inscribirme a otro periodo. Entiendo que es difícil para muchos entender que se pueda soltar el poder tan fácil, hay quienes se quisieran quedar cuatro o seis años más, yo no. N