La mejor forma de que un animal evite que se lo coman es disfrazarse de un objeto inanimado, dicen los científicos. Según un artículo publicado recientemente en la revista científica Proceedings of the Royal Society B, el camuflaje para pretender ser un objeto neutral, como una hoja, una ramita o una roca, es la mejor táctica animal para evitar que los detecten los depredadores.
“Nunca se había hecho una comparación entre los tipos de camuflaje”, dijo a New Scientist João Vitor de Alcantara Viana, de la Universidad Estatal de Campinas, en Brasil. “Pensamos que sería una gran oportunidad para comprender cómo evolucionó el camuflaje y cómo interactúan los tipos de este”.
El camuflaje animal puede presentarse en una variedad de formas, desde visible hasta olfativa. La coloración disruptiva rompe el contorno visual del propio animal, como las rayas de una cebra o las manchas de un leopardo. Mientras, otros cambian la forma en que se mezclan con el fondo a medida que cambian las condiciones, como los camaleones y los pulpos.
El camuflaje de manchas oculares puede parecerse a los ojos de un depredador, lo que ahuyenta las amenazas. Mientras, el camuflaje de movimiento involucra a un animal que se mueve de cierta manera que no parece que se esté moviendo hacia otro animal.
Los animales marinos suelen utilizar la transparencia y el contrasombreado, y el camuflaje “mascarada” se utiliza para parecerse a una parte neutral del entorno.
Los autores del artículo recopilaron datos de 84 publicaciones sobre el camuflaje animal y el tiempo de búsqueda de depredadores. Descubrieron que, en comparación con los animales no disfrazados, los depredadores tardaron cuatro veces más en encontrar animales que realizan este camuflaje “mascarada”.
OTRAS TÉCNICAS DE CAMUFLAJE ANIMAL
Esta técnica la emplean insectos palo, algunas especies de arañas que se asemejan a excrementos de animales, peces que se camuflan para parecerse a hojas en el fondo de un arroyo y una variedad de insectos hoja, entre muchos otros.
Otros métodos de camuflaje animal, como mezclarse con un fondo o tener patrones de colores caóticos, solo aumentaron el tiempo de búsqueda de depredadores en un 55 por ciento, aproximadamente.
“El camuflaje de movimiento no aumentó [el tiempo de búsqueda del depredador] pero disminuyó [la tasa de ataque del depredador] en la presa. No encontramos evidencia de que la mancha ocular aumente [el tiempo de búsqueda del depredador] y disminuya [la tasa de ataque del depredador] por parte de los depredadores”, escribieron los autores en el artículo.
Los animales también pueden usar la coloración como señal de advertencia para los depredadores. Al contrario del camuflaje, en este fenómeno llamado aposematismo el animal se vuelve lo más brillante y notorio posible para advertir al depredador que no se los coma.
Estos animales a menudo son venenosos, por lo que el depredador aprende a asociar esta coloración con el sabor horrible o la enfermedad después de comer esa especie, lo que lo lleva a evitarlos en el futuro.
Algunas formas más avanzadas de camuflaje incluyen el mimetismo, que es cuando las especies no tóxicas se aprovechan de la aversión de un depredador a estos colores brillantes.
Un ejemplo de esto se encuentra en la mariposa virrey, que ha evolucionado para parecerse a la mariposa monarca, de sabor amargo. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek).