Ensayos históricos que sentencian el intercambio de reflejos culturales. Manuscritos inéditos que dieron vida a una obra clásica universal. Un perfil personal y sugerente sobre uno de los escritores españoles más importantes. No te pierdas estos tres libros.
EL ESPEJO ENTERRADO
La primera recomendación se titula El espejo enterrado(editorial Alfaguara), del escritor mexicano Carlos Fuentes. Se trata de una colección de ensayos históricos que sentencian el intercambio de reflejos culturales que a lo largo de más de 500 años ha ido y venido de una a otra orilla del océano Atlántico.
De los espejos de obsidiana enterrados en la urbe totonaca de El Tajín a los espejos ibéricos de Cervantes y Velázquez, el de la locura y el del asombro, el libro observa que las culturas se fosilizan si están aisladas, pero nacen o renacen en el contacto con otros hombres y mujeres, los hombres y mujeres de otra cultura, otro credo, otra raza.
Asimismo, según se indica en El espejo enterrado, si no reconocemos nuestra humanidad en los demás, nunca la reconoceremos en nosotros mismos. Solo nos vemos enteros en el espejo desenterrado de la identidad cuando aparecemos acompañados del otro. Entonces somos por fin capaces de mirar de cerca las consecuencias de nuestras acciones y convertir la experiencia en conocimiento.
LOS SETENTA Y CINCO FOLIOS
La segunda sugerencia se titula Los setenta y cinco folios(editorial Lumen), unos manuscritos inéditos del escritor francés Marcel Proust que se revelan como la estructura madre de su obra maestra, En busca del tiempo perdido.
Este manuscrito mítico, saludado unánimemente por expertos y la crítica, ve la luz tras el fallecimiento de su propietario, Bernard de Fallois.
Escritos entre 1907 y 1908, con estos episodios emblemáticos y fundacionales de la obra maestra de Proust se penetra por arte de magia en la memoria proustiana como si se tratara de una primigenia autobiografía en la que los personajes y los lugares surgen en toda su desnudez, pero conservando sus nombres auténticos —la abuela Adèle, la madre Jeanne y un joven Marcel estremecedoramente humano, amoroso, atento con su familia, fiel y generoso.
Este es “el grial absoluto, la estrella inaccesible para cualquier buscador del tiempo perdido. Esta nueva obra hará las delicias de los aficionados al proustismo y los fascinados por el marcelismo, ambos religiosos del mismo culto”, ha dicho la crítica.
LA MIRADA QUIETA (DE PÉREZ GALDÓS)
La última propuesta se titula La mirada quieta (editorial Alfaguara), un ensayo del escritor peruano Mario Vargas Llosa en donde, a partir del análisis de las novelas, obras teatrales, libros y de los Episodios nacionales, crea un perfil completo, personal y sugerente sobre el escritor español Benito Pérez Galdós.
Pérez Galdós es un autor esencial en la literatura española contemporánea. Como el propio autor afirma en la introducción a La mirada quieta, “Galdós hizo lo que Balzac, Dickens y Zola hicieron en sus respectivas naciones: contar la historia y la realidad social de su país. Con sus Episodios estuvo en la línea de aquellos, convirtiendo en materia literaria el pasado vivido, poniendo al alcance del gran público una versión quieta pero amena, bien escrita, con personajes vivos y documentación solvente, de un siglo decisivo en la historia española.
“¿Fue un gran escritor? Lo fue. En el siglo XIX y comienzos del XX no hay ninguno de sus compatriotas que tenga semejante dedicación, inventiva, empeño y soltura literaria”. N