Este jueves, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó un decreto mediante el cual ordenó 134,500 reclutas adicionales como parte de la conscripción anual de primavera para proseguir con la guerra en Ucrania.
Su Ministerio de Defensa niega que los conscriptos fueran reclutados para combatir en Ucrania, donde las fuerzas rusas han topado con una férrea resistencia a la invasión iniciada el pasado 24 de febrero.
La conscripción —el servicio militar obligatorio— es un tema por demás polémico, sobre todo en lo referente al uso de reclutas en la guerra.
El 9 de marzo, el Ministerio de Defensa ruso reconoció, por primera vez, que había conscriptos combatiendo en Ucrania. También dijo que algunos eran prisioneros de guerra. Con ello contradijo lo que Putin manifestara el día anterior, al declarar que su ejército estaba compuesto solo de “militares profesionales”.
El significado del término “conscripto” varía de un país a otro. La conscripción rusa se remonta al siglo XVII, y era obligatoria para todos los hombres de entre 18 a 27 años, quienes prestaban servicio durante un periodo de 12 meses.
El decreto firmado el pasado 31 de marzo precisa que el nuevo periodo de conscripción abarcará del 1 de abril al 15 de julio del presente año. Y que todos los conscriptos serán varones que formen parte de dicho grupo etario.
En 2008, Rusia redujo el servicio militar obligatorio de dos a un año. Sin embargo, quienes eviten la conscripción pueden hacerse acreedores de una multa de hasta 200,000 rublos (2,420 dólares) e, incluso, una pena de prisión.
GUERRA CON MILES DE VÍCTIMAS
Putin justificó el “operativo militar especial” de Ucrania con el argumento de que debía “desnazificar” a los líderes de aquel país. Hasta ahora, la guerra ha cobrado miles de víctimas mortales en ambos bandos. Incluidos muchos civiles y desplazado a millones de personas que han debido huir de Ucrania para refugiarse en otros países.
Según informes de Reuters, el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, anunció el martes que los hombres llamados a servir en la conscripción más reciente serán destacados en las bases militares correspondientes a fines de mayo.
“La mayor parte del personal militar recibirá entrenamiento profesional en centros de capacitación durante un periodo de tres a cinco meses. Quiero enfatizar que los reclutas no prestarán servicio en los puntos críticos”, precisó la notificación publicada en el sitio web del Ministerio de Defensa.
Autoridades y analistas militares de Occidente han criticado mucho la actuación de las fuerzas rusas en Ucrania. El jueves 31 de marzo, Jeremy Fleming, director de la Sede de Comunicaciones del Gobierno (agencia británica de espionaje cibernético)— comentó que los soldados rusos, desmoralizados, estaban incumpliendo órdenes y saboteando sus equipos. Incluso, derribaron uno de sus aviones accidentalmente.
UCRANIA Y SU POLÍTICA DE VARONES
Al iniciar el conflicto bélico, el gobierno ucraniano decretó que los varones de entre 18 y 60 años debían permanecer en el país. Ello en la eventualidad de que fueran necesarios para combatir contra las fuerzas rusas.
Dado que muchas naciones que no están en guerra (como Alemania, Estados Unidos y el Reino Unido) no imponen el servicio militar obligatorio, la totalidad de sus fuerzas armadas se compone de voluntarios.
La última vez que el Ejército estadounidense ordenó la conscripción fue en 1973. Si bien el servicio militar fue obligatorio durante las guerras de Independencia y Civil, ambas guerras mundiales, la Guerra de Corea y la Guerra de Vietnam.
El Reino Unido adoptó la política del servicio militar obligatorio en las dos guerras mundiales y, concluida la segunda, mantuvo el reclutamiento hasta 1960. Los últimos conscriptos dejaron de prestar servicio en 1963. N
(Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek)