El material radioactivo de una planta de energía nuclear que será desmantelada en el Reino Unido pronto podría usarse para crear fuentes de energía “ultra duraderas”, dicen unos investigadores.
Científicos de la Universidad de Bristol, Reino Unido, sugieren que el carbono-14, un isótopo radioactivo, debería extraerse del desecho de la central eléctrica Berkeley en Gloucestershire y reciclarse para generar energía como parte de un proyecto revelado en 2016 que produjo una “batería de energía nuclear”.
Anteriormente, los investigadores crearon un tipo de diamante que podría generar una corriente eléctrica cuando se lo coloca cerca de material radioactivo.
Los expertos ahora dicen que el uso especial del carbono-14 podría tener el potencial de proveer energía de “forma cuasi infinita”, a la vez que ayudaría a impulsar la generación de energía limpia.
El trabajo de la Universidad de Bristol se lleva a cabo como parte de un proyecto llamado unidades sensores Avanzadas Autoalimentables en Ambientes de Radiación Intensa (ASPIRE, por sus siglas en inglés).
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El profesor Tom Scott, quien encabeza la investigación en curso, dijo que las baterías de base nuclear podrían ser extremadamente útiles ya que operan en ambientes extremos, donde podrían faltar las formas tradicionales de energía. En el futuro, incluso podrían alimentar satélites, sugirió él.
“En los últimos años, hemos desarrollado sensores de alimentación ultra baja que toman energía de desechos radioactivos”, dijo Scott en una declaración. “Este proyecto está ahora en una fase muy avanzada, y hemos probado las baterías en sensores en lugares tan extremos como la cima de un volcán”.
La central de Berkeley, el primer sitio nuclear comercial del Reino Unido de su tipo que será desmantelado, fue cerrada en 1989. El trabajo para retirar el desecho nuclear inactivo empezó este mes, pero no es seguro que los humanos entren en los núcleos del reactor antes de 2074, reportó la BBC.
Una segunda planta nuclear en la región, la central Oldbury, que está ubicada en la ribera sur del río Severn, cerró en 2012 y también está en proceso de ser desmantelada.
La investigación inicial del equipo en “baterías de diamante” usó níquel-63 como la fuente de radiación; sin embargo, su atención se enfocó en el carbono-14 cuando fue considerado más eficiente.
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Los investigadores de la universidad descubrieron que el carbono-14 se concentraba en la superficie de los bloques de grafito que se usan para mantener las reacciones en las plantas de energía nuclear. Después de ser extraído, el carbono-14 se puede convertir en diamante, lo cual ofrece protección a los humanos al contener la radiación.
“Se eligió el carbono-14 como fuente porque emite una radiación de rango corto, la cual es absorbida rápidamente por cualquier material sólido”, dijo por entonces Neil Fox, de la Facultad de Química de la Universidad de Bristol.
“Esto lo haría peligroso de ingerir o tocar con la piel desnuda, pero contenida de forma segura dentro de un diamante, ninguna radiación de rango corto puede escapar. De hecho, el diamante es la sustancia más dura conocida por el hombre, literalmente no hay algo que podamos usar que pudiera dar más protección”.
Scott añadió: “Al encapsular el material radioactivo dentro de diamantes, convertimos el problema a largo plazo del desecho nuclear en una batería de energía nuclear y un suministro a largo plazo de energía limpia”.
Esta semana, Scott sugirió que los beneficios no se limitarían a los investigadores, señalando que también facilitaría el proceso de desmantelamiento.
Él dijo: “La meta es tener una fábrica ubicada en una de las antiguas centrales eléctricas en el sudoeste que tome carbono-14 directamente de los bloques de grafito para usarlo en baterías de diamante.
“Esto reduciría la radioactividad del material remanente, haciéndolo más fácil y seguro de manejar. Ya que la mayoría de las plantas de energía nuclear del Reino Unido está programada para dejar de operar en los próximos 10 a 15 años, esto representa una oportunidad enorme de reciclar una cantidad grande de material para generar energía para muchísimos usos grandes”. El Reino Unido tiene hasta 95,000 toneladas de bloques de grafito, dijo el equipo.