A fin de proteger la integridad física y psicológica de las personas frente a las nuevas formas de violencia sexual que han surgido con el uso de nuevas tecnologías de la información y la comunicación, proponen castigar a quienes difundan imágenes íntimas sin el pleno consentimiento de quien aparezca en ellas.
De aprobarse esta iniciativa, las penas por este delito serían de entre tres y seis años de prisión y una multa cuyo valor máximo podría alcanzar 2 mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA). Esto significa que la mencionada multa por incurrir en este delito llegaría hasta los 168 mil 980 pesos.
Esta iniciativa fue presentada por el diputado Miguel Ángel Torres Olguín, coordinador parlamentario del Partido Acción Nacional en la LIX Legislatura, quien señaló que la mayoría de las víctimas son mujeres y niñas, quienes quedan vulnerables a situaciones como la extorsión, la pornografía infantil, la trata de personas y abuso sexual.
Debido a que la difusión de este tipo de contenido vulnera la privacidad de la víctima, que generalmente desconoce que su imagen fue difundida, la iniciativa propone que el delito sea conocido como una violación a la intimidad sexual, y que sea integrado al Código Penal para el Estado de Querétaro.
En estado como Coahuila, Jalisco, Yucatán y el Estado de México, entre otros, ya aplican medidas penales contra este delito.