El legislativo de Estados Unidos estará dividido entre demócratas y republicanos durante los próximos dos años. Tras la jornada electoral de este martes, que fue un referéndum de facto para el presidente Donald Trump, los republicanos retuvieron el Senado mientras que los demócratas recuperaron el control de la Cámara de Representantes.
En la elección estuvieron en juego las 435 bancas de la cámara baja, 34 en el Senado y 36 gobernaciones, así como numerosos cargos locales y estatales.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump celebró los resultados como un “tremendo éxito”, ya que un Senado dominado por los republicanos termina con cualquier especulación sobre un procedimiento de destitución en el Congreso, un fantasma que lo acechaba en los últimos meses. La Cámara baja bajo control demócratas, implica sin embargo un contrapeso para su gobierno.
Evaluando a Trump: las elecciones que definirán el rumbo de su gobierno
Estos son los puntos clave hasta el momento:
La gran victoria republicana
Pese al esfuerzo y esperanza del Partido Demócrata, los republicanos dieron un duro golpe a los esfuerzos al mantener el control del Senado al sumar más de 50 escaños, según proyecciones publicadas por la prensa estadounidense.
Los demócratas participaron en la contienda con un reto importante, pues de los 66 cargos en la cámara alta que no se renovaron, los republicanos ya mantenían el control de 42.
Tremendous success tonight. Thank you to all!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de noviembre de 2018
La noche del martes, ya con las primeras proyecciones, Trump escribió en Twitter que las elecciones de mitad de mandato del martes fueron un “tremendo éxito”.
Demócratas, rumbo a la mayoría
El Partido Demócrata se quedó con la cámara baja del legislativo por primera vez en ocho años al superar los 218 escaños necesarios para mantener el control.
El partido del expresidente Barack Obama se anotó los primeros triunfos en la Cámara de Representantes: en Florida, Donna Shalala se quedó con el escaño de la legendaria republicana Ileana Ros-Lehtinen, primera cubana-estadounidense elegida al Congreso y quien se jubila; y en Virginia, Jennifer Wexton desbancó a la saliente Barbara Comstock, según las cadenas de televisión.
La líder de la oposición demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, prometió el martes un nuevo equilibrio de poderes en el país después de que los estadounidenses “hartos de las divisiones” y anunció la “restauración de los poderes y contrapoderes constitucionales”.
Cinco estados, de rojo a azul
Los demócratas arrebataron cinco estados a los republicanos de los 36 que tuvieron elecciones, según las proyecciones de The New York Times. Con ello, la balanza queda cada vez más equilibrada en Estados Unidos.
Ted Cruz, reelecto
El republicano de Texas, Ted Cruz, derrotó al demócrata Beto O’Rourke en una de las carreras al Senado seguidas con mayor atención en las elecciones de medio mandato en Estados Unidos, según proyectaron las cadenas de noticias ABC y NBC.
La victoria de Cruz sobre O’Rourke, un carismático congresista y ex miembro de una banda de música punk, cuya campaña fue respaldada por estrellas como Beyoncé y LeBron James, fue un logro significativo para el gobernante partido Republicano para retener el control del Senado.
El duelo entre Cruz y O’Rourke fue uno de los más seguidos durante la campaña, debido a la importancia política y económica de Texas pero también debido a la profunda brecha entre los dos candidatos.
Dos mujeres indígenas hacen historia
Las demócratas Sharice Davids y Deb Haaland se convirtieron el martes en las primeras mujeres indígenas estadounidenses elegidas en la Cámara de Representantes en Washington, según proyecciones de medios.
Davids, de 38 años, abogada, ex luchadora de artes marciales mixtas y declarada lesbiana, derrotó al actual representante republicano Kevin Yoder en el estado tradicionalmente conservador de Kansas.
Davids fue criada por una madre soltera y veterana del ejército.
Haaland, de 57 años y de Nuevo México, venció en tanto a la republicana Janice Arnold-Jones y a Lloyd Princeton, del Partido Libertario.
Miembro de la tribu Pueblo Laguna, Haaland es una conocida activista comunitaria en su distrito claramente demócrata, que se esfuerza para promover el voto entre la población indígena, que representa 2% de los estadounidenses.
Y también dos mujeres musulmanas
Ilhan Omar y Rashida Tlaib se convirtieron este martes, en las elecciones de mitad de mandato, en las dos primeras mujeres musulmanas en resultar electas al Congreso de Estados Unidos.
Ambas demócratas, de Minnesota y Michigan respectivamente, fueron electas a la Cámara de Representantes. “Lo logramos, juntos. ¡Gracias!”, tuiteó Ilhan Omar, una refugiada somalí.
Después escribió dirigiéndose a Rashida Tlaib, nacida en Detroit de padres palestinos: “Felicitaciones a mi hermana Rashida Tlaib por su victoria. No puedo esperar para compartir una banca contigo, inshallah”.
Ilhan Omar, de 36 años, que ganó fácilmente en una circunscripción demócrata de Minnesota, llegó durante su adolescencia a Minneapolis, una gran ciudad de este estado del norte del país.
Rashida Tlaib, de 42 años, también estaba asegurada de alzarse con el triunfo en un feudo demócrata de Michigan en el que no tenía adversario.
El primer gobernador gay
El legislador demócrata Jared Polis se convirtió el martes en el primer hombre abiertamente homosexual en ganar una gobernación en Estados Unidos, al derrotar al republicano Walker Stapleton en la carrera por el cargo en Colorado.
El congresista de 43 años fue claro sobre su orientación sexual durante la campaña, refiriéndose a ello a menudo en sus críticas al presidente Donald Trump. Sucederá al demócrata John Hickenlooper, quien ha estado en el cargo desde 2011.
Latina, la mujer más joven en el Congreso
La joven estrella de los demócratas Alexandria Ocasio-Cortez, de origen puertorriqueño y nacida en el Bronx, hizo historia el martes al convertirse en la mujer más joven en ser electa al Congreso a los 29 años, según proyecciones de los medios estadounidenses.
Ocasio-Cortez enarbola con orgullo sus raíces y su latinidad, y asegura que conoce bien los problemas de la clase obrera que promete defender porque ella misma los padeció.
El récord de la congresista más joven era ostentado hasta hoy por la republicana Elise Stefanik, una ex asesora de la Casa Blanca para el presidente George W. Bush que fue electa a los 30 años en un distrito del estado de Nueva York.
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Con información de AFP