El Congreso de Oaxaca ocupa el primer lugar en el ámbito nacional por su onerosidad, al haber incrementado en un 87 por ciento el gasto durante 2017, en relación con el presupuesto autorizado, lo que representa un monto de 324 millones de pesos.
En el “Informe Legislativo 2018”, el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) señaló que la LXIII Legislatura se aprobó el año pasado, 397 millones de pesos, pero terminó ejerciendo 739 millones de pesos.
El monto supera los recursos asignados al Fondo de Reconstrucción de Oaxaca por el terremoto del 7 de septiembre de 2017, así como las réplicas que devastaron la región del Istmo de Tehuantepec.
Aunado a ello, la Cámara de Diputados local se encuentra dentro de las entidades que carecen de un Servicio Profesional de Carrera (SPC), el cual está diseñado para que personal técnico y capacitado pueda desempeñar las funciones de asesoría legislativa.
El también llamado servicio civil parlamentario, consiste en que el personal que labora en el Congreso ingrese a través de concursos con criterios objetivos y meritocráticos, además de recibir capacitación continua, ascienda o realice una carrera laboral dentro del Congreso y conozca sus derechos y obligaciones labores.
El IMCO indica que en este año, las legislaturas del país se aprobaron 14 mil 481 millones de presos, por lo que considera indispensable realizar en verdad una reasignación de recursos que reduzca la onerosidad.
Por lo que propone: “reajustar el presupuesto entre un 25 y 40 por ciento, suprimir partidas a grupos parlamentarios y comisiones; eliminar la práctica del “moche”. Además de reducir comisiones legislativas, contratos por honorarios y viáticos”.
Aunado a lo cual el Instituto Mexicano de la Competitividad, considera indispensable eliminar gastos de seguros médicos, telefonía celular, vales de gasolina y comida, uso de vehículos y contratación de despachos.
Y sostiene que “la propuesta de Morena representa una oportunidad única para tener una discusión nacional y contar con congresos locales eficientes y austeros”.
El IMCO afirma que se requiere un análisis profundo de los gastos para tener un mayor control y eficiencia. Y es que en siete legislaturas locales (Ciudad de México, Michoacán, Estado de México, Sonora, Baja California, Quintana Roo y Jalisco) el presupuesto por diputado es superior al de la Cámara de Diputados federal.
Mientras que el costo de un diputado de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal equivale a 10 diputados del congreso de Puebla.
“Si los congresos locales tuvieran un presupuesto por diputado como el de Puebla, se ahorrarían 10 mil 503.8 millones de pesos, lo que equivale al 27 por ciento del presupuesto del programa Pensión para Adultos Mayores en 2018”, apunta.