El rescate de los 12 niños y su entrenador atrapados en una cueva desde el pasado 25 de junio se convirtió en una carrera contra el reloj.
Aunque los rescatistas habían dicho que los 13 podían permanecer en la cueva hasta cuatro meses hasta que el nivel del agua bajara y pudieran salir caminando, especialistas señalaron que el nivel de oxígeno bajó al 15%, informó el jefe de la marina tailandesa, el almirante Aphakorn Yoo-kongkaew.
Estos niveles podrían provocar hipoxia lo que vuelve peligroso dejar a los menores más tiempo dentro de la cueva.
“Ya no podemos esperar que todas las condiciones (estén listas) debido a la situación. (…) Originalmente pensamos que los niños podían permanecer seguros dentro de la cueva durante bastante tiempo, pero las circunstancias han cambiado. Tenemos una cantidad limitada de tiempo”, dijo a los periodistas el viernes.
Yookongkaew también explicó que han repartido botellas de oxígeno a lo largo de la cueva para intentar aprovisionar a los niños y sus acompañantes, entre ellos, su entrenador de fútbol. Pero no precisó si intentarán rescatarles este viernes, un día en el volverán a caer lluvias monzónicas en esta región montañosa de Tailandia.
La marina tailandesa ha insinuado que posiblemente los socorristas no tendrán otra opción que intentar un rescate complejo y peligroso. El tiempo para sacarles de la cueva es “limitado”, reconocieron las autoridades tailandesas.
La declaración se da luego de que un exbuzo de la marina tailandesa falleció el viernes.
“Tras haber entregado una reserva de oxígeno, a su vuelta, no tuvo suficiente oxígeno”, anunció el vicepresdiente de la provincia de Chiang Rai, Passakorn Boonyaluck.
Este exmiembro de los comandos de la Marina tailandesa “perdió el conocimiento en el camino de vuelta, su compañero de buceo intentó ayudarle y llevarlo”, precisó el jefe de los comandos de la Marina.
LEE: “¡Mucha fuerza!”: dice uno de los 33 mineros chilenos a niños atrapados en Tailandia
“Aunque hayamos perdido a un hombre, seguimos teniendo fe en nuestra misión”, aseguró, con la voz temblorosa, el viernes por la mañana.
La tragedia recuerda la dificultad del camino que hay que recorrer, bajo el agua, hasta llegar a los doce niños y su entrenador de fútbol, bloqueados en esta cueva inundada.
Los socorristas trataban el viernes de avanzar al máximo en sus preparativos de evacuación antes de que retorne la lluvia, según las previsiones.
Esperan poder, con ayuda de bombas, que el nivel del agua baje a tiempo lo suficiente como para que los niños puedan salir de allí sin tener que bucear o haciéndolo por menos tiempo.
LEE: Lo que sabemos sobre el equipo de futbol perdido en una cueva en Tailandia y cómo será su rescate
5 horas de buceo
De momento, un buzo experimentado necesita 11 horas para hacer un viaje de ida y vuelta hasta donde están los niños: seis de ida y cinco de vuelta gracias a la corriente.
El recorrido es de varios kilómetros e incluye pasos angostos y tramos bajo el agua.
Por ahora, los socorristas dicen que prefieren esperar a que baje el agua, excepto para suministrarles víveres durante semanas: esto permitiría a los niños salir a pie por la galería, con una parte mínima de tramos submarinos que se tengan que recorrer con máscaras.
Es la opción privilegiada por los socorristas, que pusieron en marcha un sistema de bombeo, asistidos por ingenieros japoneses, que ya ha sacado de la cueva de 10 km de largo el equivalente de más de 50 piscinas olímpicas.
Un multimillonario al rescate
Elon Musk, el multimillonario y emprendedor espacial dijo a través de su cuenta de Twitter que tiene un plan para rescatar a los niños.
“Sospecho que el gobierno tailandés tiene la situación bajo control, pero estaré encantado de poder ayudar si hay una forma de hacerlo”, dijo en su cuenta.
Musk planteó introducir un tubo de nylon dentro de la cueva y llenarlo de aire para crear un túnel submarino. Su compañía de excavación, The Boring Company, cuenta con un avanzado radar de sondeo terrestre y es muy buena para cavar hoyos.
LEE: 5 planes para rescatar a los 12 niños y su entrenador atrapados en una cueva en Tailandia
“Tal vez valga la pena intentarlo: insertar un tubo de nylon de un metro de diámetro (o un conjunto de tubos más cortos para las secciones más difíciles) a través de la red de cuevas e inflarlo con aire”, dijo.
“Eso debería crear un túnel de aire bajo el agua contra el techo de la cueva que se adapte a formas extrañas como las que hay en el agujero de 70 cm”, añadió.
Con información de AFP.