Miles de integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) marcharon este miércoles en la capital oaxaqueña para conmemorar el doceavo aniversario del fallido desalojo del plantón magisterial, ordenado por el entonces gobernador Ulises Ruiz Ortiz.
Los hechos derivaron en un conflicto político social que se extendió a lo largo de seis meses, tiempo durante el cual se registraron al menos 20 asesinatos de activistas y simpatizantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO).
La caminata en la que participaron todas las regiones del gremio adherido a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), partió a las 11 de la mañana del crucero de Viguera, ubicado en la salida a la ciudad de México y concluyó alrededor de la una de la tarde en el zócalo de la ciudad.
Desde el quiosco, entre lonas, casas de campaña y puestos de vendedores ambulantes, el dirigente seccional convocó a los mentores a la unidad y recordó que a las cuatro de la mañana del 14 de junio de 2006, policías estatales ingresaron al campamento que mantenían en ese mismo lugar, para tratar de desalojarlos.
“Nos reagrupamos y respaldados por jóvenes y padres de familia recuperamos el centro y mantuvimos la exigencia de la desaparición de poderes”, señaló.
Apuntó que 12 años después, el magisterio oaxaqueño se encuentra en una nueva lucha, consistente en la abrogación de la Reforma Educativa, libertad para los presos políticos, la aparición con vida de los estudiantes de Ayotzinapa, así como justicia para los pobladores de Nochixtlán.
Luego del mitin, indicó que la movilización de este jueves demostró la unidad del magisterio oaxaqueño, aunque reconoció que escuelas de la región de Valles Centrales y en el Istmo se encuentran en actividades, pese al paro de labores que realizan los mentores desde el pasado 28 de mayo.
Resaltó que el magisterio implementó desde el inicio del ciclo escolar, mecanismos para avanzar en los planes de estudios brindando atención extra de manera diaria, de tal forma que el paro no afecte la educación de los y las niñas.