La campaña #PescaPeroBien pretende mejorar el futuro de la pesca en México.
Dicen que la base de todo cambio está en los consumidores. Si el consumidor prefiere productos de pesca responsable y sustentable, entonces los productores, a través de incentivos, se enganchan con esta demanda del mercado y mejoran sus prácticas de producción.
Para lograr esta cadena de consumo responsable se creó la iniciativa #PescaPeroBien, cuyo objetivo es “velar por las mejores prácticas del mar a la mesa o desde las granjas sustentables a la mesa”, explica la bióloga Citlali Gómez-Lepe, miembro del comité de asesores de este proyecto y presidenta del Consejo Mexicano de Promoción de los Productos Pesqueros y Acuícolas (Comepesca).
El Dr. Luis Bourillón, vicepresidente de Sustentabilidad de #PescaConFuturo de Comepesca afirma que México puede convertirse en un referente mundial en pesca sustentable, pero hace falta trabajar todos juntos para lograrlo, desde el consumidor hasta el productor, y por supuesto, el sector restaurantero. Si realmente queremos satisfacer la demanda de las próximas generaciones, es necesario trabajar todos los días para lograr el objetivo y certificar a todas las especies, para un bien común y del medio ambiente.
La campaña #PescaPeroBien persigue tres objetivos básicos: tener conciencia de la sobreexplotación, operar de manera social y económicamente justa y responsable, y garantizar la satisfacción de la demanda de futuras generaciones.
Este proyecto —que une esfuerzos del sector privado, el gobierno mexicano y la población en general— buscará que se impulsen acciones para preservar la conservación de los recursos marinos, así como generar ganancias para los productores del sector y, al mismo tiempo, lograr un mayor consumo de productos pesqueros que cumplen con requisitos de calidad y sustentabilidad.
De acuerdo con investigaciones realizadas por el Fondo para la Defensa del Medio Ambiente (EDF Environmental Defense Fund por sus siglas en inglés), por cada peso que produce la pesca en México se generan 60 centavos adicionales, mientras que el promedio en el mundo son tres pesos.
Para algunas pesquerías ya es un requisito de exportación tener una certificación de sustentabilidad; es un movimiento a escala global. Aunque México ya se subió a la ola de la pesca sustentable, la transición es lenta. Por esta razón, #PescaPeroBien ahora es el motor para lograr la sustentabilidad en más y más pesquerías hasta que nuestro país se convierta en un referente mundial.
El doctor Luis Bourillon, asesor de #PescaPeroBien y representante en México del Marine Stewardship Council (MSC) explica que cuando una pesquería quiere entrar en una certificación de calidad y sustentabilidad lo primero que debe hacer es una evaluación y posteriormente desarrollar un plan de mejora a través de estrategias tecnológicas, apoyo gubernamental, de la ciencia, etcétera.
La pesca en México es una actividad importante en términos de generación de empleos y desarrollo regional de comunidades. Según cifras del consejo de Comepesca, más de 300,000 familias dependen directamente de la actividad pesquera, mientras que más de 2 millones de mexicanos lo hacen indirectamente.
Algunos de los productos que a lo largo del lanzamiento de la campaña se han certificado han tenido un aumento considerable en la demanda durante los últimos años, tal es el caso de la trucha, para la cual la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), ha destinado un gran apoyo en México, lo cual impacta positivamente en la economía de las familias del sector rural de 19 entidades del país.
También la producción de tilapia se incrementó significativamente en los últimos años, lo que ha llevado a México a generar el 25 por ciento de toda la producción de esta especie en América Latina, según datos de Conapesca.
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LUR
Aunque “lur” significa “tierra” en vasco, en realidad no solo vas a comer platos de estas latitudes en el restaurante de los chefs Mikel Alonso y Gerard Bellver (sí, los mismos de Biko). Aunque acaba de cumplir un año, LUR ya es uno de los sitios favoritos de Polanco por servir platos llenos de sabor y bien hechos, siempre.
Desde la sopa de cebolla y el mexicanísimo caldito de frijol con tortilla, queso fresco y aguacate, y hasta el solomillo de cerdo ibérico con queso azul y el chamorro braseado, LUR ofrece sabores contundentes que obligan a explorar el menú completo en cuanto das el primer bocado.
Para empezar a conocer la cocina de Mikel y Gerard puedes pedir el menú de la casa, el cual consiste en cinco tiempos (¡con todo y postre!), u ordenar cualquier plato a la carta. Aventúrate a probar sus agüitas frescas —adoramos la de fresa con jitomate y la de piña con romero— y compartir algunos antojitos al centro, como los triangulitos fritos de quesadilla con chicharrón prensado, hongos y flor con queso, un guiño a la fritanga mexicana.
Claro que encontrarás el clásico jamón ibérico de bellota y una buena selección de quesos surtidos por si tienes ganas solo de una noche de vinito y charla. La carta, por cierto, tiene etiquetas de México, España, Francia, Italia, Estados Unidos y Nueva Zelanda.
¡Ojo, por ningún motivo ignores el postre! El pastel cremoso de chocolate con crema avainillada es uno de los mejores que hemos probado en la vida.
Dirección: Avenida Presidente Masaryk 86, Polanco, Polanco V Sección, CDMX
Facebook: @LURrestaurante
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Mexsi Bocu
Ni completamente mexicano, ni 100 por ciento francés, este restaurante que comenzó el año pasado una nueva era con el chef Diego Sobrino es la conjunción de ingredientes mexicanos con técnicas francesas.
Basta con pedir las gorditas de chicharrón y escamoles para entenderlo. Este plato crujiente y sabroso invita a dejar los cubiertos a un lado y entrarle como se hace en nuestro México, con las manos. O los macarrones de foie gras con una palanqueta de frutos secos, tocino, cacao y compota de cebolla y jamaica, una combinación extraordinaria de sabores dulces y salados que te vuela la cabeza. No sabes si es un postre o una entrada, ¡pero sabes que quieres comer otro!
El menú cambia cada tres o cuatro meses, aproximadamente, pero las gorditas, el sándwich de porchetta —con tocino y salsita de quesos, un pecado ultracalórico que debes permitirte— y el pulpo a las brasas son los platos que ya tienen un lugar asegurado en el corazón de los comensales.
Para esta temporada la sugerencia son platillos superfrescos como la ensalada de jitomates o el ceviche de pulpo. ¿Te gusta la carne tártara? Aunque no está en el menú puedes pedirla y la harán para ti supermexicana o muy clásica.
Acompaña tu comida con alguno de los cocteles de la casa o una copita del vino que gustes. ¿Antojo de postre? Diego Sobrino hace créme bruleé con frutas de temporada, vale la pena probarlo.
Dirección: Durango 359, Roma Norte, CDMX
Facebook: @MexsiBocu.BistroBrasserie