Por: Summer Meza
Un libro nuevo de Michael Wolff ofrece una perspectiva privilegiada de la candidatura del presidente Donald Trump y su primer año en el cargo, y revela docenas de detalles fascinantes sobre la administración.
El libro, Fire and Fury: Inside the Trump White House, fue escrito después de las que Wolff afirma que fueron más de 200 entrevistas con el presidente y su círculo íntimo. Trump, junto con un representante de la primera dama Melania Trump y la secretaria de prensa Sarah Huckabee Sanders, ya ha condenado algunas de las alegaciones en el libro, diciendo que no son ciertas.
He aquí algunos de los detalles más explosivos revelados en el libro, el cual se publicará la próxima semana.
1. Steve Bannon, ex estratega en jefe de Trump, describió una reunión montada por Donald Trump Jr. con una abogada rusa vinculada con el Kremlin durante la campaña de 2016 como “traidora” y “antipatriota”. “Van a romper a Don Junior como un huevo en TV nacional”, se dice que comentó Bannon.
2. Bannon supuestamente dijo que el presidente posiblemente conoció a los participantes de la reunión después, especulando que el hijo de Trump los llevó a la oficina de su padre. “La posibilidad de que Don Jr. no hiciera pasar a esos beodos a la oficina de su padre en el vigésimo sexto piso es cero”, mencionó Bannon.
3. Trump no quería ganar, y nadie en su campaña pensó que ganaría. “Bueno, solo sería un problema si ganáramos”, aseguró el ex asesor de seguridad nacional Michael Flynn a sus amistades con respecto a su decisión de aceptar $45,000 dólares por un discurso en Rusia.
4. Ivanka, la hija de Trump, describió el cabello de su padre como un peinado de ingeniería perfecta que requiere de muchos pasos para completarse. “Ella a menudo describió la mecánica detrás de ello a sus amistades: una coronilla absolutamente limpia —una isla contenida tras una cirugía para reducir el cuero cabelludo— rodeada por un círculo afelpado de pelo alrededor de los lados y el frente, desde el cual todas las puntas son jaladas hacia arriba hasta encontrarse en el centro y luego bajadas de nuevo y aseguradas con un fijador”, dice el libro.
5. Trump se preguntaba qué era una lluvia dorada tras oír reportajes sobre el dossier de inteligencia que afirma que las fuerzas de seguridad rusas tienen detalles comprometedores del presidente. “Habiendo prescindido de [el jefe de CNN, Jeff] Zucker, el presidente de Estados Unidos siguió especulando sobre qué implicaba una lluvia dorada”, escribe Wolff.
6. Trump especulaba sobre los defectos de su personal después de colgar el teléfono tras hablar con ellos. “Bannon era desleal (sin mencionar que siempre se ve de la mierda). [Reince] Priebus era débil (sin mencionar que era bajo de estatura, un enano)”, Wolff recuerda las reflexiones de Trump. “[Jared] Kushner era un lambiscón. Sean Spicer era estúpido (y también se ve terrible). Conway era una llorona. Jared e Ivanka nunca debieron venir a Washington”.
7. Ivanka y su marido, Jared Kushner, acordaron que si uno de ellos se postulaba a la presidencia en el futuro, sería ella. “¿No dijeron eso?”, comentó Bannon al enterarse del trato. “Alto. Oh, por favor. ¿En realidad no dijeron eso? Por favor, no me digas eso. Oh, por Dios”.
8. Trump come en McDonald’s tan a menudo por paranoia y porque es germófobo. “Desde hace mucho teme ser envenenado, él dirá que una de las razones por las que le gusta comer en McDonald’s era porque nadie sabía que iría y la comida se preparaba con seguridad”, menciona el libro.
9. Trump le preguntó a Hope Hicks, directora de comunicaciones de la Casa Blanca quien había salido con el gerente de campaña Corey Lewandowski, por qué le preocupaba la mala publicidad de Lewandowski después de que fue despedido. “Ya has hecho bastante por él”, supuestamente dijo Trump. “Eres la mejor colita que él tendrá jamás”.
10. Hicks y Trump tuvieron una relación muy cercana, y el círculo íntimo de Trump la veía como una especie de hija del presidente. “[A Hope] Hicks de hecho la pensaban como la hija verdadera de Trump, mientras que a Ivanka la pensaban como su verdadera esposa”, declara el libro.
11. Como candidato, Trump no tenía interés en aprenderse la Constitución, de la cual sabía muy poco. “Apenas llegué a la Cuarta Enmienda, antes de que su dedo jalara hacia abajo su labio y los ojos se le pusieran en blanco”, comentó Sam Nunberg, ex asesor de la campaña de Trump.
12. Trump usó un lenguaje despectivo para expresar su ira por Sally Yates. “Trump concibió una antipatía temprana y obsesiva por la subprocuradora federal Sally Yates”, se lee en el libro. “Ella era, decía él echando chispas, tamaña ca—“.
13. Trump no disfrutó su toma de posesión. “Estaba furioso de que estrellas de primera desdeñaron el evento, disgustado con el alojamiento en Blair House, y visiblemente peleando con su esposa, quien parecía al borde de las lágrimas”, afirma el libro.
14. Trump le aseguró a Melania que no ganaría la elección. La noche de la elección, cuando quedó en claro que ganaría, “Melania era un mar de lágrimas, y no de alegría”.
15. La prohibición de viajes fue aprobada un viernes para que la gente protestara en los aeropuertos. Al preguntarle por qué se eligió el momento en fin de semana, Bannon comentó: “Para que los delicaditos acudieran a los aeropuertos y se amotinaran”.
16. Trump nunca lee. “Él no procesaba la información en algún sentido convencional. No leía. En realidad, ni siquiera echaba una ojeada. Algunos creían que, en todo sentido práctico, no era más que un semialfabetizado”, dice el libro.
17. Trump mencionó que se acostaba con otras mujeres. “A Trump le gustaba decir que una de las cosas que hacían que la vida valiera la pena era llevarse a la cama a las esposas de tus amigos”, afirma el libro.
18. Trump ofreció casar a los presentadores de TV Joe Scarborough y Mika Brzezinski. “Ustedes deberían casarse”, les comentó Trump. “¡Yo puedo casarlos! Soy un ministro unitario por internet”, dijo Kushner. “¿Qué?”, replicó el presidente. “¿De qué estás hablando? ¿Por qué ellos querrían que tú los casaras cuando yo podría casarlos? ¡Cuando podría casarlos el presidente! ¡En Mar-a-Lago!”
19. El estilo de vida del presidente seguía muchas rutinas inusuales. “Si no tenía su cena a las 6:30 con Steve Bannon, entonces, más a su gusto, para esa hora estaba en la cama con una hamburguesa con queso, viendo sus tres pantallas y haciendo llamadas telefónicas”, menciona el libro.
20. Trump compartía detalles privados de sí mismo, luego se molestaba cuando se filtraba la información. “Conforme se filtraron los detalles de la vida privada de Trump, él se obsesionó con identificar al soplón. Sin embargo, la fuente de todos los chismes bien pudo haber sido el mismísimo Trump”, escribe Wolff. “En sus llamadas a lo largo del día y en la noche desde su cama, a menudo hablaba con personas quienes no tenían razones para callarse lo que les confiaba”.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek