Más estadounidenses ahora ven el racismo como un problema mayor en Estados Unidos que en cualquier otro momento desde que empezó a recopilarse la información hace más de 20 años. Un sondeo del Centro Pew de Investigación publicado el martes indicó que 58 por ciento de los estadounidenses ve el racismo como un “gran problema” en la sociedad, ocho por ciento más que hace dos años y más del doble del nivel de la cifra en 2011.
El sondeo a 1,893 adultos se hizo entre el 15 de agosto y el 21 de agosto, poco días después de un mitin de nacionalistas blancos en Charlottesville, Virginia, en el que murió una mujer que protestaba por el mitin. En las secuelas, el Presidente Donald Trump fue ampliamente condenado por culpar a “ambos bandos” por la agitación, y por declarar que había “gente muy buena” entre quienes se reunieron en el bando de los nacionalistas blancos, supremacistas blancos y neonazis.
En días recientes, Trump también anunció un perdón a Joe Arpaio, un ex alguacil de Arizona quien fue sentenciado por negarse a acatar una orden de la corte en contra de detener gente con base en su perfil racial y por detenerla con base en sospechas de su condición migratoria.
Trump ha sido criticado desde hace mucho por su retórica divisiva y por abrazar elementos de la extrema derecha, incluido su ex estratega en jefe Steve Bannon, quien otrora dirigió Breitbart News, la cual él describió como “la plataforma para la derecha alternativa”.Derecha alternativa es un término general para grupos que abrazan el racismo y el nacionalismo blanco.
El sondeo es el primero de su tipo que se lleva a cabo desde que Trump entró en la Casa Blanca. Muestra el nivel más alto de preocupación desde que la investigación sobre el tema inició formalmente en 1995, cuando 41 por ciento de los estadounidenses dijo que el racismo era un gran problema. En 1971, un sondeo de Harris indicó que 26 por ciento de los estadounidenses pensaba que los negros enfrentaban “muchísima” discriminación.
El último sondeo se llevó a cabo en 2015, cuando 50 por ciento de los estadounidenses consideró al racismo como un problema mayor. Esto fue apenas un mes después de que Trump anunciara su campaña por la presidencia al afirmar que los inmigrantes de México eran criminales, narcotraficantes y violadores.
Antes de eso, la cifra alcanzó un mínimo nuevo durante la presidencia de Barack Obama. En el mismo mes que Obama fue juramentado como el primer presidente negro del país en 2009, solo 26 por ciento dijo que el racismo era un gran problema. La cifra aumentó a 33 por ciento en 2010 antes de volver a bajar a 28 por ciento al año siguiente.
Desde 2009, el porcentaje de personas quienes ven el racismo como un gran problema se ha más que duplicado entre republicanos y demócratas. Sin embargo, en los últimos dos años, el aumento ha sido solamente entre los demócratas quienes han cambiado su opinión. Setenta y seis por ciento de los demócratas o quienes se inclinan por los demócratas ahora considera al racismo como un gran problema, más del 58 por ciento que lo pensaba en 2015. En contraste, para los republicanos, la cifra ha disminuido a 37 por ciento de 40 por ciento.
También hay una discrepancia notable entre las razas. Aun cuando una mayoría de los blancos, 52 por ciento, ahora también ve la raza como un gran problema, para los negros estadounidenses la cantidad ahora está en 81 por ciento.
Las discrepancias se reflejan de forma similar en las opiniones sobre Las Vidas de los Negros Importan. Sesenta y cinco por ciento de los republicanos se opone al movimiento, en comparación con 80 por ciento de demócratas quienes lo apoyan. Mientras tanto, 52 por ciento de los blancos y 82 por ciento de los negros lo apoyan.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek