Ocho miembros del Consejo Nacional de Asesoría en Infraestructura (NIAC, por sus siglas en inglés) renunciaron la semana pasada en protesta por la respuesta del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump a la violencia en Charlottesville y por la poca atención para hacer frente a “las urgentes cuestiones de seguridad nacional”.
“No denunció la intolerancia y la violencia de los grupos de odio, ofreciendo falsas equivalencias y atacó los motivos de los CEOs que habían dimitido de sus papeles de asesoramiento en protesta”, señala la carta de renuncia dirigida al mandatario.
La carta obtenida por NextGov acusa que la administración actual no ha demostrado estar atenta a las cuestiones de seguridad nacional ni responda a los consejos de expertos y asesores sobre el tema.
Trump, añade el texto, ha amenazado amenazado la seguridad de la patria. “No ha prestado suficiente atención a las crecientes amenazas a la ciberseguridad de los sistemas críticos de los que dependen todos los estadounidenses, incluidos los que afectan los sistemas que apoyan nuestro proceso electoral democrático”.
Los exmiembros de NIAC criticaron la decisión de retirarse del Acuerdo de París, su intención de revocar los estándares de construcción de riesgo de inundación y “sus muchas otras acciones para ignorar la amenaza acuciante del cambio climático”.
“La infraestructura moral de nuestra Nación es la base sobre la que se construye nuestra infraestructura física (…) Las acciones de la Administración socavan esa base”, señala.