La alta prevalencia de diabetes en México representa una crisis de salud pública con más de 96,000 muertes relacionadas a este padecimiento ante lo cual las autoridades, presionadas por organizaciones civiles, establecieron en 2014 un impuesto a las bebidas azucaradas del 10 por ciento que, ahora se sabe, puede disminuir sustancialmente la morbilidad y la mortalidad por diabetes y enfermedades cardiovasculares en la próxima década, según concluye un estudio publicado por el diario PLOS Medicine.
La investigación realizada por la Universidad de California menciona que México al hacerse un lugar entre los países con mayor sobrepeso en el mundo tuvo que encarar esta problemática con un gravamen en las bebidas con alto contenido calórico, lo cual representó una lucha ante la industria refresquera que alegó que este tipo de impuesto sería insuficiente para frenar el consumo.
No obstante, estudios como el que hicieron la Universidad de Carolina del Norte y el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) arrojaron que en 2014 los mexicanos redujeron en un 6 por ciento las compras de estas bebidas, una cifra que ascendió al 12 por ciento en diciembre de ese año.
En ese sentido, las investigadores de la Universidad de California hicieron una proyección del consumo de refrescos en los adultos mexicanos de entre 35 y 94 años la cual modeló una reducción del 10 por en la ingesta de estos productos, correspondiente a la disminución observada después de la implementación del impuesto.
Los resultados han sido ampliamente divulgados: 9300 casos menos de incidencia de diabetes tipo 2; se evitarían 20,400 accidentes cerebrovasculares e infartos de miocardio, además de que se salvarían 18,900 vidas entre 2013 y 2022. A esto se suma un ahorro de 983 millones de dólares.
Los insumos para este modelo incluyeron cambios a corto plazo en el consumo de bebidas azucaradas en respuesta a la imposición del gravamen y datos de encuestas de investigación gubernamentales y de instituciones públicas de salud.
Datos difundidos por la organización El Poder del Consumidor indican que México es el país con mayor índice de muertes por diabetes en el mundo, dentro del grupo de naciones con más de 80 millones de habitantes.
La misma información refiere que esta “pandemia de diabetes” pasó de ser responsable de 46,000 muertes en el año 2000 a más de 96,000 en 2015. Sumado a esto, cada 10 años se duplica el número de nuevos casos de diabetes en el país.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) indicó recientemente que la tasa de mortalidad por diabetes mellitus en toda América es de 34 adultos por cada 100,000 habitantes mientras que entre los adultos mexicanos es de 90.
A principios de octubre pasado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió a los gobierno gravar las bebidas azucaradas para combatir la obesidad en el mundo, al estimar que esta medida podría reducir el consumo de esos productos y por lo tanto “salvar vidas”.
La agencia de la ONU afirmó que existen “pruebas crecientes” de que nuevos impuestos a las bebidas azucaradas “reduciría proporcionalmente su consumo”. Por ello pidió un aumento del 20 por ciento en los precios de estas bebidas lo cual tendría una reducción del 20 por ciento en su consumo.
