Ejido El Diez, Delicias, Chih.- A unos días de que un animal extraño, supuestamente el llamado “chupacabras”, atacó una granja en esta comunidad y mató 18 borregas y una gallina, a las que desangró al cortarles el cuello, algunos habitantes aseguran que viven con temor y ahora tratan de proteger a sus animales.
Uno de los vecinos recordó que el mes de noviembre del año 2011, en esta misma región ocurrió otro ataque similar, cuando un animal extraño mató a 18 cabras.
En esa ocasión una persona dijo que vió al supuesto animal que mató las cabras y, aseguró que era de aspecto humanoide y tenía alas.
En los últimos meses en la región centro sur del estado, las autoridades han levantado varios informes de hechos similares, sin embargo, no hay hasta el momento un reporte oficial de qué tipo de animal es lo que está cometiendo estos ataques.
“Yo no creía en eso del “chupacabras”, pero que más puede ser, dijo Ramón Chávez Núñez, propietario de la granja donde ocurrió recientemente el ataque.
La granja donde ocurrieron los hechos, tiene una barda perimetral construida con bloques de concreto, la cual mide casi tres metros de altura.
El señor Chávez comentó que el animal que atacó sus borregos tuvo que brincar la barda. “No hay de otra manera, tuvo que volar la barda. Si hubiera sido un felino como un puma o coyotes, los perros que cuidan aquí habrían defendido”, añadió el señor Chávez.
El afectado dijo que en las últimas dos semanas ha perdido 33 de sus animales; primero le robaron cinco borregas preñadas y un borrego semental y, como ladrones dejaron la puerta del corral abierta, los animales se salieron, comieron de más y murieron otros ocho.
A una semana de esto, comentó el señor Chávez, otras diez de sus borregas amanacieron muertas con heridas en el cuello causadas por un animal extraño y, un día después encontró otras ocho borregas y una gallina sin vida, la cual, dijo el quejoso, no tenía una gota de sangre.
Después de los ataques, dice el señor Ramón Chávez, que se quedó a dormir a la intemperie, cubierto con unos cueros de borregos y armado con un machete. “Estuve esperando a ver si regresaba otra vez el animal, pero no vino”, mencionó el señor Chávez.
