Por primera vez, un exresponsable del Partido Popular (PP) expresó abiertamente este miércoles el deseo de que el jefe del gobierno saliente, Mariano Rajoy, renuncie a ser el candidato del PP para dirigir el próximo gobierno.

Rajoy, de 60 años, y presidente del PP desde hace once, mantiene su candidatura a su propia sucesión, tras las elecciones del 20 de diciembre, en las que los conservadores perdieron la mayoría absoluta de que gozaban en el Congreso de los Diputados, al lograr sólo el 28.7 por ciento de los sufragios.

En una entrevista con la radio Cadena Ser, el expresidente regional de Murcia, España, Alberto Garre, afirmó de manera contundente que “todo pasa por que Mariano Rajoy dé un paso atrás, por España y por el propio Partido Popular”.

Preguntado por si quiere que Rajoy dimita, se limitó a responder: “estoy diciendo que no tiene por que proponerse como el único candidato del PP a la presidencia del gobierno”.

“Esto (que Rajoy se aparte) es un clamor en el partido, pero es una mayoría silenciosa”, aseguró.

También llamó a sus compañeros de partido a no “seguir ciegos” y “sordos ante el clamor popular” de los españoles, cada vez más preocupados por los escándalos de corrupción.

Rápidamente, diferentes altos responsables del partido aseguraron que Garre no hacía más que expresar un opinión personal. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró así que Rajoy “concita un consenso básico incuestionable” en el seno del partido.

El líder Ciudadanos (centroderecha), la formación ideológicamente más cercana al PP, Albert Rivera, ha cuestionado en varias ocasiones el liderazgo de Rajoy, reprochándole no haber actuado con suficiente contundencia contra la corrupción.

Ciudadanos apoyó la candidatura a la investidura del socialista Pedro Sánchez, con quien firmó un pacto, pero los diputados rechazaron mayoritariamente la pasada semana esta alianza de socialistas y centristas.

Los partidos tienen hasta el 2 de mayo para investir a un jefe del gobierno y evitar nuevas elecciones en junio.

Rajoy propone, por ahora en vano, dirigir una gran coalición que incluya al PSOE y Ciudadanos.

El lunes, Rajoy aseguró que “no me planteo en este momento” la retirada de la candidatura, afirmando que “si mi partido quiere y hay elecciones, que espero que no haya, mantengo mi voluntad de presentarme”.