El documento, titulado “Esto es por lo que morimos”, detalla los abusos de derechos humanos cometidos en las minas de cobalto de la República Democrática del Congo (RDC). El cobalto es un mineral clave para la producción de smartphones y otros dispositivos electrónicos, y más de la mitad del suministro mundial proviene de RDC.
En los meses de abril y mayo de 2015, Amnistía Internacional llevó a cabo investigaciones en un área minera del sur de RDC, y descubrió que niños de apenas siete años trabajaban en las minas. Los abusos de derechos humanos en las operaciones mineras incluyeron exposición al polvo tóxico de cobalto, que puede ocasionar un padecimiento mortal conocido como “enfermedad pulmonar por metales duros”. La jornada de 10 a 12 horas de trabajo redituaba a los niños de 1000 a 2000 francos congoleños (entre uno y dos dólares).
Fairphone, una empresa social que busca producir smartphones usando minerales obtenidos éticamente, dice que en el futuro, materiales como el cobalto podrán derivar de fuentes recicladas.
“Fairphone celebra la publicación de Amnistía Internacional, que resalta la relación entre la minería de cobalto y el trabajo infantil en RDC”, dijo a Newsweek Bibi Bleekemolen, responsable de innovación de impacto en Fairphone. “Esos informes ayudan a situar estos problemas en niveles más altos de la agenda internacional”.
En respuesta al documento, Apple dijo: “El trabajo de menores jamás es tolerado en nuestra cadena de suministro y nos enorgullece haber liderado a la industria introduciendo nuevas salvaguardias”.
Otras compañías, como Sony y Samsung, también dijeron tener una política de cero tolerancia para el trabajo infantil. Sin embargo, Mark Dummett, investigador de derechos humanos en Amnistía Internacional, afirmó que tienen los recursos para llevar a cabo revisiones básicas de antecedentes.
“Los lujosos escaparates de tiendas y las tecnologías de punta para mercadotecnia contrastan drásticamente con los niños que cargan sacos de rocas, y los mineros en estrechos túneles excavados a mano, corriendo el riesgo de daño pulmonar permanente”, dijo Dummett. “Millones de personas disfrutan de los beneficios de las nuevas tecnologías, pero rara vez se preguntan cómo se hacen. Ya es hora de que las grandes marcas se hagan responsables de la extracción de las materias primas que componen sus lucrativos productos”.
“Los riesgos de salud y seguridad hacen de la minería una de las peores formas de trabajo infantil. Las compañías cuyas utilidades globales totalizan 125 mil millones de dólares, no pueden afirmar, de manera creíble, que son incapaces de verificar el origen de los minerales clave para sus producciones”.
La lista completa de las compañías implicadas en el informe incluye a Daimler, Dell, HP, Huawei, LG Chem, Microsoft, Vodafone y ZTE.
“Las compañías tienen la responsabilidad de respetar los derechos humanos en cualquier parte del mundo donde operen”, sentencia el informe. “El gobierno de RDC debe extender y obligar al cumplimiento de protecciones de trabajo y seguridad para todos los obreros artesanales, y crear más áreas de minería artesanal autorizadas”.
“El gobierno, junto con las compañías implicadas, debe garantizar que los niños sean retirados de las condiciones de trabajo peligrosas, resolver sus carencias educativas y satisfacer sus otras necesidades. Todos los gobiernos deben promulgar y obligar el cumplimiento de leyes que requieran la debida diligencia corporativa y la divulgación pública de información pertinente al cobalto y otros minerales”.