El presidente Donald Trump olvidó por instantes la negociación abierta que tiene con el gobierno mexicano y reforzó su promesa de campaña más notable, la construcción del muro, del cual prometió su aceleración.
“Somos un país que pierde trabajo en su territorio y lo entrega fuera. Somos un país que defiende las fronteras de otros países pero no tiene las suyas seguras”, dijo durante la conferencia anual de los conservadores estadounidenses.
“Tenemos los malos dentro y los vamos a echar. Los criminales y vendedores de droga no podrán volver”, afirmó al revivir este viernesla incendiaria retórica de su campaña al participar, por primera vez como mandatario, en la conferencia.
“La era de las palabras vacías se terminó. Eso terminó. Ahora es el momento de la acción”, dijo Trump a un auditorio reunido en las afueras de Washington.
En un discurso de alrededor de una hora, Trump repitió sus promesas de campaña. No solo sobre la construcción de un muro en la frontera con México, sino también la reforma del sistema de seguros médicos, la expulsión de inmigrantes indocumentados o la derrota del “terrorismo del islamismo radical”.
Como ya había ocurrido durante toda su campaña electoral, el público interrumpía su discurso gritando “¡U S A! ¡U S A!”
En un momento, Trump mencionó a su adversaria en la elección presidencial, la demócrata Hillary Clinton, y el auditorio estalló en gritos de “¡Tránquenla!”, una consigna que se había tornado común en sus actos de campaña.
En otra parte de su discurso, Trump volvió a arremeter contra la “prensa extraordinariamente deshonesta” y reiteró su convicción de que las “noticias falsas” deben ser consideradas “enemigas del pueblo”.
“Son las enemigas del pueblo porque no tienen fuentes. Simplemente las inventan cuando no las tienen”, acusó el presidente.
Con información de AFP