El secretario de Salud de Oaxaca, Juan Díaz Pimentel, denunció que funcionarios de esa dependencia están involucrados en “desvíos millonarios” durante los últimos dos sexenios. Estos malos manejos derivaron en una deuda de 6 mil millones de pesos y un déficit anual de mil 700 millones anuales para la dependencia.

“De seguir así, en los próximos cinco años (es decir, al terminar el sexenio de Alejandro Murat Hinojosa) tendríamos una deuda de 15 mil millones de pesos”, explicó el funcionario en un video oficial de tres minutos y medio de duración.

En los últimos dos sexenios, en los que se realizaron los desvíos, la Secretaría tuvo al menos cinco titulares, entre los que se encuentra el mismo Díaz Pimentel, quien fue el primer secretario de salud del priista Ulises Ruiz Ortiz.

Además de él, por la Secretaría de Salud desfilaron: Martín Vásquez Villanueva, Sofía León, Germán Tenorio Vasconcelos (actualmente recluido en el penal de Ixcotel) y Héctor González, los dos últimos durante el sexenio de Gabino Cué Monteagudo.

Antes de la llegada de Díaz Pimentel, el gobernador Alejandro Murat designó a Gabriela Velásquez Rosas y Celestino Alonso Álvarez como titulares de la Secretaría de Salud; el actual secretario no especificó si éstos también incurrieron en responsabilidad durante su periodo al frente de la dependencia.

Movilizaciones por falta de pagos

Unos 7 mil trabajadores de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) se manifestaron por el atraso en el pago de aguinaldos y la primera quincena de enero; de éstos, a 2 mil 300 contratados bajo la modalidad de eventuales se les rescindió su contrato, confirmó Díaz Pimentel.

Otros 4 mil 500, contratados bajo la modalidad de regularizados, también enfrentarán la revisión de sus contratos.

Desde el 15 de enero, los trabajadores presionaron a la Sección 35 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Salud, liderada por Mario Félix Pacheco, a declararse en Asamblea Permanente en tanto no se les depositara a los trabajadores sus pagos pendientes; además exigieron la recontratación de los trabajadores eventuales despedidos.

Los sindicalizados han marchado, interrumpido labores parcialmente, desconocido al secretario y exigido mesas de trabajo conjuntas con autoridades federales; mientras, el gobierno del estado mantiene su postura de revisar exhaustivamente las plazas y no conservar aquellas que no tengan respaldo presupuestal federal, situación en la que están 2 mil 300 trabajadores eventuales.

Este martes 24 de enero, a través de un video, Juan Díaz Pimentel lanzó las acusaciones de fraude dentro de los SSO.

“En los dos últimos sexenios hubo desvíos millonarios, creciendo la nómina de manera exponencial llegando a 18 mil trabajadores, de los cuales 2 mil 300 fueron contratados de manera ilegal”, señala en el video.

“Esta nómina se pagaba usando dinero de las obligaciones que tenían que entregarse al ISSSTE, dejando en la indefensión a los trabajadores de base e incumpliendo con los compromisos a la Secretaría de Hacienda.

“En consecuencia el día de hoy tenemos una deuda de 6 mil millones de pesos y un déficit de 1,700 millones anuales.

“Esto ocurrió, entre otras cosas, porque se desviaban recursos de la Seguridad Social de los trabajadores de base y de sus obligaciones con la Secretaría de Hacienda para pagar a los 2,300 trabajadores eventuales

“De seguir así, en los próximos cinco años tendríamos una deuda de 15 mil millones de pesos, esto sería el resultado de la deuda actual de 6 mil millones, más 8 mil 500 millones que es el acumulado de los 1,700 millones de déficit anual por cinco”.

Integrantes tanto del Sindicato como de la Secretaría señalaron que los trabajadores eventuales sí son necesarios en los diversos centros médicos en los que están adscritos, son especialistas y enfermeras. Aseguran que aún con los trabajadores eventuales, el Sector Salud oaxaqueño mantiene un déficit de especialistas y enfermeras.

Los SSO cuentan con 33 hospitales. Uno de 180 camas, el Hospital General Aurelio Valdivieso; cuatro de 60 camas en Salina Cruz, Tuxtepec, Juchitán y Pochutla; nueve de 30 camas y 19 de doce camas; además del Hospital psiquiátrico y el Hospital de la Niñez Oaxaqueña.

Los adeudos con el ISSSTE alcanzan los $1,750 millones, y con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público otros $2,450 millones. A estas deudas se añaden los pagos no realizados a terceros institucionales y no institucionales como cajas de ahorro privadas, Fonacot, entre otros; y es que los SSO hacen los respectivos descuentos a los trabajadores pero no realizan los pagos correspondientes a las entidades con las que el trabajador tiene compromisos.

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Logran los primeros acuerdos

Según el secretario de Salud, ya hay acuerdos con la sección 35 del Sindicato. En el video refiere que se pagará a los formalizados y regularizados, pero no se mantendrán los contratos para los 2 mil 300 eventuales. Los comisionados sin permiso de la dirigencia nacional y la Secretaría de Salud federal, tendrán que volver a sus puestos de trabajo.

“Y a partir del viernes establecer reuniones de trabajo en donde participarán funcionarios de orden federal, una representación sindical nacional, las dirigencias locales y los representantes institucionales de los Servicios de Salud de Oaxaca, con el fin de revisar las nóminas de manera escrupulosa y llegar a conclusiones.

“Y también ubicar a más de mil trabajadores que cobran puntualmente pero que físicamente no hemos podido localizar. Los comisionados que no tengan sus permisos en regla con la dirigencia nacional, tendrán que volver a sus centros de trabajo”, añadió en el mensaje.

El secretario explicó que cancelando los 2,300 contratos de eventuales y regresando a los trabajadores comisionados, que no tengan permisos en regla, a sus centro de trabajo se logrará “un ahorro de 120 millones de pesos al mes, que equivale al costo de 400 mil consultas de medicina general y 170 mil de especialidad”.

Con ello, de acuerdo con Díaz Pimentel, iniciará el saneamiento del sector Salud de Oaxaca y, “el reordenamiento de la Secretaría de Salud (…) es una oportunidad para corregir errores del pasado”.

“(…) los trabajadores de base contarán con la certeza de que tendrán los fondos de jubilación, se pagarán puntualmente sus créditos y todas las unidades médicas tendrán el personal necesario para otorgar los servicios que demanda la población y se acabará con el millonario desvío de recursos.