Durante tres años, el gobierno de Aguascalientes gastó dinero público en dos aeronaves. Una era propiedad de la administración estatal; la otra, de un empresario al que el entonces gobernador llamó públicamente su amigo y al que en el mismo periodo se adjudicaron millonarios contratos de arrendamiento, sin licitar.
¿Quiénes viajaron en el avión que el gobernador le rentó a su amigo? ¿Cuándo? ¿A dónde volaron? Son preguntas que, al menos por ahora, el gobierno no puede responder, pues la empresa se quedó con los registros que contienen esa información.
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Entre 2012 y 2016, el gobierno que encabezó Carlos Lozano de la Torre gastó 83.6 millones de pesos en la renta de una aeronave.
La cantidad es el monto otorgado a Universal Jet Rental de México, S.A. de C.V. en cinco contratos que la Oficialía Mayor adjudicó directamente a esa empresa, a petición de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
De acuerdo con los documentos de los que Newsweek Aguascalientes obtuvo copias a través de la Ley de Transparencia, todos los años el gobierno del estado contrató el arrendamiento de “transporte aéreo no regular, nacional e internacional”. Salvo excepciones, el servicio lo prestaría una aeronave LearJet 25B, número de serie 193, con matrícula XA-WWW, propiedad de la compañía.
Solo entre 2012 y 2014, la renta del avión significó un gasto de 46.9 millones de pesos. Y el gobierno firmó los contratos de arrendamiento de ese periodo a pesar de que ya disponía de un avión similar.
Otros tres contratos firmados por la administración estatal con el Aeropuerto Internacional de Aguascalientes revelan que el gobierno pagó 576 mil pesos por la renta del Hangar 10 de la terminal porque no “existía disponibilidad de inmueble con características específicas para la guarda de la aeronave LearJet 24D/1973, matrícula XC-AGU propiedad del gobierno del estado”.
El resguardo del LearJet 24D implicó un costo anual de 192 mil pesos, IVA incluido, en 2012, 2013 y 2014. En los tres contratos se pactó una renta mensual de 16 mil pesos.
Dos aviones, una investigación en ciernes
Una investigación en ciernes de la Contraloría del Estado, antes Secretaría Fiscalización y Rendición de Cuentas, confirmó que la pasada administración dispuso, hasta 2015, de una aeronave similar en modelo y capacidad a la que rentaba con la empresa de aviación registrada en Nuevo León.
FRAGMENTO DEL TEXTO DE PORTADA EDICIÓN IMPRESA DE ENERO
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