Tan sólo durante el mes de septiembre, la Guardia Sanitaria del Instituto de Servicios de Salud del Estado (ISSEA) ha recaudado alrededor de 400 mil pesos por concepto de multas y sanciones económicas impuestas a establecimientos comerciales de diversos giros por incumplir los protocolos sanitarios relativos a la pandemia del Covid-19.
El coordinador de la Guardia Sanitaria, Octavio Jiménez Macías, aseguró que cada semana son sancionados hasta cinco establecimientos de diversos sectores económicos por incumplir las disposiciones de las autoridades, principalmente lo relativo al aforo máximo permitido o por medidas específicas como el uso del cubrebocas.
“Ahorita ya van multas por cerca de los 400 mil pesos en este mes nada más, sí es una cantidad alta, este mes fue muy movido en esta parte; son por incumplimientos de los protocolos sanitarios y las normas vigentes, ha sido una combinación de todas estas irregularidades, se están sancionando de tres a cinco establecimientos por semana”.
Reiteró que en fechas recientes se ha tenido un mayor relajamiento del cumplimiento de las medidas sanitarias, por lo que se ha llegado a la aplicación de las sanciones económicas, posterior a los apercibimientos.
“Ha habido una relajación por parte de los establecimientos, como que se olvidaron un poquito de la pandemia, del cumplimiento y hemos estado aplicando las sanciones, tenemos un decreto vigente que tenemos que estar vigilando su cumplimiento”.
Jiménez Macías agregó que aún continúa vigente el decreto emitido por el gobierno estatal, que señala que se podrá permitir un aforo máximo del 50% en los eventos públicos en lugares cerrados y del 60% en actividades en espacios abiertos, el cual tendrá vigencia hasta este 30 de septiembre.
Hasta cinco anexos y centros de rehabilitación de adicciones han sido clausurados
En otro tema, el titular de la Guardia Sanitaria aseguró que en lo que va del año ya suman cinco centros de rehabilitación de adicciones clausurados por incumplir las medidas sanitarias y no contar con las condiciones que establece la ley.
“En el año ya hemos clausurado unos cuatro o cinco anexos, hemos encontrado irregularidades fuertes como que hay menores de edad con mayores, lugares en donde hay mujeres también, y esto nos ha permitido detectar riesgos importantes y eliminarlos porque son situaciones muy complicadas”.
Entre las principales irregularidades detectadas en este tipo de lugares se encuentran el hacinamiento, en donde la capacidad de aforo es menor a la cantidad de personas que habitan el anexo, y la falta de atención médica especializada, lo que impide que se tenga un adecuado proceso de rehabilitación.
“Hemos detectado hacinamiento, falta de atención médica, incumplimiento de medidas sanitarias, es un problema bastante serio, yo creo que en este año son los lugares que más hemos verificado y sancionado”.
En este sentido, indicó que se continuarán aplicando operativos de verificación en este tipo de centros, ya que actualmente son de los establecimientos con mayores reportes y quejas por su funcionamiento.
“Los anexos nos siguen dando muchos dolores de cabeza, son de los lugares que seguimos teniendo en la mira”, concluyó el funcionario estatal.