El Congreso de Guanajuato exhortó al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, a que a través de la Secretaría de Salud se garantice la realización del tamiz metabólico neonatal en todo el país. Lo anterior, aseguraron los legisladores, es con el fin de proteger la salud y la calidad de vida de todos los niños.
Los diputados solicitaron al titular de la Secretaría de Salud, Jorge Alcocer Varela, que se realicen todas las acciones administrativas y contratos necesarios para que a la brevedad se preste este servicio.
De acuerdo con el documento emitido por el Pleno del Congreso, a nivel nacional, cada año se realizan más de 2.4 millones de pruebas del tamiz metabólico neonatal, de las cuales, solo la mitad corresponden a la Secretaría de Salud del gobierno federal.
En relación con ello, se mencionó que el ser brindadas de manera gratuita en los hospitales públicos representa un gran apoyo a las familias, ya que el costo de esta prueba en un laboratorio privado llega a superar los 3 mil pesos.
Asimismo, los legisladores expusieron que el tamiz se realiza a través de la contratación de servicios por medio de la Subsecretaria de Prevención y Promoción de la Salud y el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva.
Sin embargo, aseguraron que dicho proceso se interrumpió el pasado 21 de marzo, con un oficio en el que se les informó a las autoridades estatales de la finalización del contrato, “dejando en entredicho la salud de los niños” beneficiarios.
“Por eso nos parece tan preocupante como indignante el hecho de que el gobierno federal replique en el caso de esta prueba su ya rutinario pretexto del combate a la corrupción para cerrar de tajo los recursos destinados al tamiz neonatal”, dijo el legislador Luis Antonio Magdaleno Gordillo.
Además, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, del total de pruebas aplicadas, el 86% de los bebés no presenta riesgos, mientras que el 14% tiene alguna complicación de salud.
Basado en dichas cifras, los diputados aseguraron que al año se realizan alrededor de 1.2 millones de tamizajes a cargo de la Secretaría de Salud, por lo que si se deja de hacer la prueba se pondría en riesgo a cerca de 170 mil recién nacidos en todo el país.