Un grupo de 27 militares fue detenido tras sublevarse este lunes contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, dos días antes de manifestaciones opositoras que exigirán un gobierno de transición y elecciones.
A la agitación que provocó el fugaz alzamiento se sumó una sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ, de línea oficialista) que declaró nula la junta directiva parlamentaria presidida por el joven opositor Juan Guaidó.
Bajo el liderazgo de Guaidó, el Congreso –de mayoría opositora– declaró a Maduro “usurpador” tras juramentarse el 10 de enero para un segundo mandato considerado ilegítimo por varios gobiernos, y prometió una amnistía para los militares que lo desconozcan.
“Hacemos un llamado a la Fuerza Armada a restablecer el orden. Familia militar, allí están los que quieren perseguir”, dijo Guaidó, tras la resolución que reiteró el fallo judicial de 2016 que declaró en desacato al Parlamento y nulas sus decisiones.
En la madrugada, 27 miembros de la Guardia Nacional (GNB) sustrajeron armas de guerra de un puesto militar en Petare (este) y se atrincheraron luego en el cuartel del barrio Cotiza (norte), donde fueron detenidos, según el informe oficial, que reporta control de la situación.
“Aquí está la tropa profesional de la GNB en contra de este régimen al cual desconocemos completamente, necesito el apoyo de ustedes, salgan a las calles”, dijo un uniformado a quien las autoridades identificaron como Bandres Figueroa, en uno de varios videos que circularon en las redes sociales.
En una vía de acceso al cuartel de Cotiza, aún en la oscuridad de la madrugada, los sublevados, armados y con los rostros descubiertos, grabaron videos que hicieron circular en las redes sociales, en los que dijeron desconocer a Maduro y pidieron el respaldo de la población.
Cerca de él, se observa a un pequeño grupo de militares armados. “Pueblo salgan”, gritan. “Ustedes querían que la Fuerza Armada prendiéramos la mecha, aquí la estamos prendiendo, necesitamos el apoyo de ustedes”, asegura otro.
El hecho ocurre en momentos en que la oposición llamó a manifestarse el miércoles por un gobierno de transición que convoque a elecciones, ante lo que el oficialismo convocó a sus seguidores. Será el primer gran pulso en las calles tras las protestas que dejaron unos 125 muertos en 2017.
Retomando la ofensiva, la mayoría opositora en el Parlamento declaró a Maduro “usurpador” tras haberse juramentado el 10 de enero para un segundo mandato, desconocido por parte de la comunidad internacional que consideró fraudulenta su reelección.
“¡Estamos con ellos!”
En un comunicado divulgado por el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino López, la Fuerza Armada se refiere a los sublevados como un “reducido grupo de asaltantes” que, dijo, incluso había “secuestrado” a cuatro militares.
“Durante la detención se logró recuperar armamento robado y en los actuales momentos se encuentran brindando información de interés a los organismos de inteligencia y al sistema de justicia militar. A estos sujetos se les aplicará todo el peso de la ley”, subrayó.
Tras enterarse del hecho a través de los videos, un grupo de vecinos de Cotiza llegó a las cercanías del cuartel para dar apoyo a los insurrectos, sonaron cacerolas y trancaron una calle con basura, tras lo que fueron dispersados por efectivos policiales y militares, constató un equipo de la AFP.
“Estamos con ellos, si ellos se unen con nuestro país estamos con ellos, vamos a estar en las calles. ¡Libertad!”, gritó una mujer. “¡Queremos que Maduro se vaya, estamos cansados!”, espetó un hombre.
El grupo de sublevados fue llevado al Fuerte Tiuna -el principal complejo militar del país- bajo las órdenes de la fiscalía y justicia militar, según versiones de prensa.
“Fueron neutralizados, rendidos y capturados, en tiempo récord, ya están confesando detalles, lo primero que dijeron fue que les ofrecieron villas y castillos y los dejaron solos, que los habían engañado”, tuiteó Diosdado Cabello, número dos del gobierno chavista.
Descontento militar
El jefe del Parlamento, Juan Guaidó, quien ha llamado a desconocer a Maduro, sostuvo por su parte que lo ocurrido “es una muestra del sentimiento generalizado que impera dentro” de la Fuerza Armada.
Abogando por quebrar el decisivo apoyo de la Fuerza Armada que tiene Maduro, el Parlamento se comprometió hace una semana a “decretar una ley de amnistía” para “funcionarios civiles o militares” que lo desconozcan.
Rocía San Miguel, experta en asuntos militares y presidenta de la ONG Control Ciudadano, aseguró a la AFP que el hecho “puede ser descrito como una expresión de descontento, que no encontró respuesta en otras unidades militares”.
La Fuerza Armada, integrada por unos 365,000 efectivos y 1.6 millones de milicianos civiles, reafirmó su lealtad a Maduro tras la investidura.
Pese al empeño por mostrarse monolítica, dos generales figuran entre los detenidos por un presunto atentado contra el mandatario el 4 de agosto, cuando dos drones cargados de explosivos estallaron cerca de una tarima donde encabezaba un acto militar.
Unos 180 efectivos fueron detenidos en 2018 acusados de conspirar, según San Miguel. La oenegé Human Rights Watch denuncia torturas.
En un contexto en que pocos escapan a la escasez de alimentos y medicinas y a la hiperinflación, unos 4,309 efectivos desertaron de la Guardia Nacional en 2018, según una lista filtrada desde el organismo y citada por Control Ciudadano.
La oenegé estima que unos 10,000 miembros de la Fuerza Armada pidieron la baja desde 2015.