La Comisión de Justicia del Senado dio comienzo este viernes a la sesión donde votará si recomienda la designación del juez Brett Kavanaugh a la Suprema Corte de Estados Unidos, un día después de una dramática audiencia en la que el magistrado negó furibundo las acusaciones de agresión sexual relatadas en detalle por una de sus presuntas víctimas.
Los senadores integrantes de la comisión dieron comienzo a la sesión y tienen previsto pronunciarse sobre su recomendación en una primera votación a las 13:30 horas locales.
El senador republicano Jeff Flake señaló en un comunicado difundido poco antes de iniciarse la sesión que daría su apoyo a Kavanaugh. El legislador fue increpado por un grupo de mujeres antes de ingresar al recinto de la comisión en el Senado. “Hablamos del futuro de nuestro país, señor”, le gritó una de ellas.
Este incidente retrasó algunos minutos el comienzo de la sesión, que se desarrolla en un ambiente de extrema tensión, una nueva señal de las profundas divisiones políticas que afectan a Estados Unidos.
Los 11 republicanos de la comisión aprobaron que se realice la votación a las 17H30 GMT, mientras que los 10 demócratas votaron en bloque de forma negativa. Furiosos, varios senadores demócratas se retiraron de la sala en señal de protesta.
Los demócratas reclaman una investigación del FBI sobre las acusaciones de agresión sexual que pesan sobre el juez Kavanaugh.
Los republicanos “tomaron su decisión antes de haber escuchado una sola palabra” de Christine Blasey Ford, una de las tres mujeres que acusan al magistrado, dijo la senadora demócrata Dianne Feinstein.
El presidente Donald Trump mantuvo su apoyo a Kavanaugh desde el momento en que terminaron las audiencias del jueves, una maratón de testimonios e interrogatorios transmitidos en directo por televisión en los que Blasey Ford, de 51 años, lo acusó de haber intentado violarla y el juez se defendió indignado y clamó ser inocente.
“Yo creí que me iba a violar”, dijo Blasey Ford enumerando los detalles de aquella noche en que supuestamente fue agredida, en una declaración leída con silencios intercalados, mientras luchaba contra las lágrimas.
Ante la pregunta de cuán segura estaba de quién había sido su agresor, se expresó con confianza: “De la misma forma que estoy segura de que estoy hablando con usted ahora”.
Están “indeleblemente en el hipocampo la risa, las ruidosas risas de ellos dos, divirtiéndose a mi costa”, dijo Blasey Ford en uno de los momentos clave de la audiencia, en el que reiteró que estaba “segura al 100%” de que fue Kavanaugh quien la agredió.
Después fue el turno de réplica de Kavanaugh, que cerró su testimonio jurando “por Dios” que había dicho toda la verdad, tras una audiencia de horas en la que afirmó su inocencia.
“Yo no voy a dejarme intimidar y renunciar a este proceso”, dijo.
“Mi familia y mi nombre han sido destruidos de una forma total y permanente por estas acusaciones falsas y despiadadas”, dijo el juez conservador.
En la audiencia dijo además que el proceso de confirmación se había convertido en una “vergüenza nacional”.
– “El Senado debe votar” –
“El juez Kavanaugh le mostró a Estados Unidos exactamente por qué yo lo nominé. Su testimonio fue potente, honesto y cautivador”, escribió Trump en Twitter, dando carpetazo a las expectativas que generó el miércoles al decir que podría “cambiar de opinión” y retirar a su candidato.
“El Senado debe votar”, añadió el mandatario.
La Comisión Judicial, integrada por 11 republicanos y 10 demócratas, votará su recomendación antes de que la nominación pase al pleno del Senado, donde los republicanos tienen una leve mayoría de 50-49.
La asociación jurídica American Bar Association, que es la más grande de su tipo en el país, urgió a la Comisión a posponer la votación hasta que el FBI pueda realizar una investigación sobre las acusaciones contra el magistrado.
Hace dos semanas, Kavanaugh parecía encaminado a obtener el visto bueno del Senado para entrar en la Corte Suprema, una jurisdicción que dirime cuestiones fundamentales de la sociedad, como el derecho al aborto, a portar armas de fuego y los derechos de las minorías.