Estudiantes de primero a tercer grado de la Escuela Primaria Rural “Emiliano Zapata”, de la comunidad El Copalillo, de este Municipio, participaron en la estrategia pedagógica, denominada “Tipi Lector”, con la cual, la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG), busca fomentar el amor por la lectura entre las y los estudiantes de este nivel educativo.
La estrategia mencionada forma parte de la Política de Aprendizajes Fundamentales (PAF), en Guanajuato, implementada por la SEG, en sus más de 10,000 escuelas primarias del Estado.
Un ejemplo destacado de esta política, es la escuela primaria rural “Emiliano Zapata”, perteneciente a la Delegación Regional IV, a cargo del maestro, Juan Luis Saldaña López, quien impulsa y fortalece estas acciones en las más de 800 Escuelas Primarias existentes en los siete municipios que la conforman.
La directora del plantel, Carmen Limas, mencionó, que estas acciones pueden marcar una gran diferencia en la educación de niñas y niños, ya que al involucrarlos desde una edad temprana, se fomenta la formación de hábitos de lectura que pueden perdurar a lo largo de sus vidas.
La estrategia “Tipo Lector”, es una iniciativa valiosa que se implementó en este centro de trabajo escolar, bajo tres fases; la primera, fue la capacitación que recibieron las y los docentes sobre técnicas de promoción de la lectura; las segunda, fue la evaluación y seguimiento de la enseñanza lectora y la tercera, fue el involucramiento y participación activa de la familias de las y los alumnos.
Las actividades que se desarrollaron en la Escuela Primaria “Emiliano Zapata”, fue el arranque con la entonación de una canción “Cuando a la selva fui”, donde las y los alumnos, padres, madres y docentes realizaron diversos movimientos que les permitieron expresar sus sentimientos y emociones de manera no verbal, brindándoles un espacio para la creatividad y la expresión fomentando la interacción y colaboración.
A continuación, se leyó en voz alta el cuento “Si Yo fuera bruja”, donde a la comunidad se le permitió desarrollar su imaginación, despertando el interés por la lectura.
Acto seguido, se hizo una selección de libros de la biblioteca escolar, donde las madres y padres de familia leyeron a sus hijos, entrando a un mundo letrado.
La siguiente, actividad, fue el arrullo “Al rorro niño” donde las mamás y los papás abrazaron y arrullaron a sus hijas e hijos, cómo cuando eran bebés, manifestándoles su gran amor y fortaleciendo la parte emocional de sus hijos.
Se realizó, también, un taller de una “pequeña bruja móvil”, con el apoyo y guía de los parientes asistentes al evento, donde las y los alumnos desarrollaron su creatividad e imaginación.