Se estima que actualmente, hay 20 mil propiedades que son ofertadas para el servicio de hospedaje a través de la plataforma Airbnb, lo que representa alrededor del 60 por ciento de las 33 mil habitaciones de hotel repartidas en los 46 municipios de Guanajuato.
Así lo informó el director general de Desarrollo Turístico de Guanajuato, Francisco Javier Valverde Polín, quien destacó que el número de habitaciones está creciendo de forma acelerada, al grado de que podrían llegar a un número muy similar al que concentran los hoteles formales a nivel estatal.
“Tenemos alrededor de 33 mil cuartos de hotel entre León, que es el que más tiene 9 mil. Tenemos Celaya, Salamanca, Irapuato, y por supuesto San Miguel Allende y Guanajuato. De Airbnb podríamos estar en un 60 por ciento de esas 33 mil habitaciones de hotel con más de 20 mil propiedades” señaló.
Por ejemplo, dijo que en San Miguel de Allende ya se estiman 3 mil habitaciones y se habla de otro tanto es destinos como Guanajuato capital, donde también se acerca a las 4 mil habitaciones de hotel y un número cercano a las 4 mil casas que se ofrecen para el servicio de hospedaje.
Por lo anterior, advirtió que en ello radica la competencia desleal que representan este modelo de negocio y servicio frente a la hotelería convencional, a pesar de contar ya con la Ley de Establecimientos de Servicios de Hospedaje de Guanajuato, donde se establece el pago de impuesto de hospedaje por parte de los huéspedes y el cedular por parte de los anfitriones.
“Sin lugar a dudas las plataformas de otra manera tienen que participar y colaborar en el impuesto de hospedaje como lo hacen todos los demás ya hemos hecho ciertas modificaciones normativas, porque no depende de nosotros, es toda la parte de la plataforma. Vamos bastante avanzados y sí, es un objetivo que tenemos que llevar a cabo” aseguró.
Dichos impuestos aún no se aplican, por ello el funcionario estatal expresó que el Servicio de Administración Tributaria del Estado de Guanajuato (SATEG) tendría que presionar a Airbnb para que cumpla con esa obligación que sí acreditan los hoteleros tradicionales.