El Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM (ICN) informó que este lunes 8 de enero, a la 1:17 de la madrugada, “México hizo historia al despegar el cohete Vulcan Centaur con la nave espacial Peregrine que llevará al proyecto Colmena a la luna”, que fue diseñado, desarrollado y probado en el laboratorio del Instituto.
“Con este proyecto, la UNAM se ha vuelto pionera en el desarrollo de microrrobótica espacial, la cual es un área tecnológica que tendrá gran auge en los próximos años, cuando se impulse la minería espacial”, indicó en su cuenta de X el mismo instituto.
EL PROYECTO COLMENA DE MÉXICO ESTUDIARÁ EL SUELO LUNAR
Añadió: “Es importante señalar que el despegue fue uno de los tantos retos que enfrentará la misión, los próximos serán la puesta en órbita y el alunizaje, este último se tiene previsto para el próximo 24 de febrero”.
Hace unas semanas, el doctor Gustavo Medina Tanco, investigador del ICN, y su equipo realizaron los últimos ajustes del software de Colmena antes de que la nave espacial Peregrine (de la empresa estadounidense Astrobotic) comenzara el proceso de carga de combustible previamente a ser incorporada al cohete Vulcan Centaur, de la United Launch Alliance (ULA).
En este proyecto, que tiene como objetivo estudiar el suelo de la luna y probar diferentes conceptos y estrategias para microrrobótica espacial, participaron alrededor de 250 alumnos de licenciatura, maestría y doctorado de diversas disciplinas como ingeniería, astronomía, matemáticas, actuaría, química, geofísica, geología, psicología y diseño industrial.
El equipo diseñó y desarrolló cinco pequeños robots de tan solo diez centímetros de diámetro y cuatro de altura con un peso cada uno de 57 gramos. “Para hacer este tipo de mini robots se realizó mucha innovación, principalmente en procedimientos y estrategias de construcción, en diseño y en resolución de problemas”, indicó Medina Tanco, de acuerdo con un comunicado del ICN.
UNA ANOMALÍA TRAS DESPEGUE
“Lograr participar en esta misión no fue sencillo; la nave espacial solo lleva 20 cargas útiles o proyectos, los cuales en su gran mayoría son de la NASA. También hay una de Japón, otra de la agencia espacial alemana y Colmena, que es el único proyecto de México y de América Latina”, añadió.
Horas más tarde del despegue si informó que la primera nave espacial estadounidense que intentará aterrizar en la Luna en más de medio siglo sufrió una “anomalía” después de desacoplarse del cohete con el que despegó con éxito este lunes, de acuerdo con la compañía privada que construyó el aparato.
“Tras la activación del sistema de propulsión, Peregrine entró en estado operacional completo”, escribió la empresa Astrobotic. Sin embargo, “desafortunadamente, ocurrió una anomalía” que evitó que el módulo “alcanzara una orientación estable hacia el sol”, agregó la empresa, lo que impide que sus paneles puedan generar su máxima capacidad de energía. “El panel solar se utiliza para proveer carga a la batería y mantener la orientación del módulo”.
Si Astrobotic logra alunizar con el módulo Peregrine en una región de latitud media de la Luna llamada Sinus Viscositatis, o Bahía de la Pegajosidad, el 23 de febrero, podría convertirse en la primera empresa privada en lograr este hito. N