Como se vio con el DeLorean, en Volver al futuro, los autos voladores serán una realidad en dos años. Los taxis voladores han tardado mucho en convertirse en nuestro presente, pero estarán “en el mercado en 2025”, primero en Estados Unidos y después en Emiratos Árabes Unidos e India, aseguró este miércoles 15 de noviembre Billy Nolen, director de seguridad de Archer Aviation.
“Lo que considerábamos como ciencia ficción se ha convertido hoy en una realidad. Está pasando, es real y lo verán en el mercado en 2025”, declaró en el Salón Aeronáutico de Dubái.
Se espera que la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos apruebe en 2025 el Midnight de Archer Aviation, un avión eléctrico para cuatro pasajeros, con despegue y aterrizaje verticales.
Esto conducirá a una certificación “casi simultánea” en Emiratos, según Nikhil Goel, director comercial de Archer, que cuenta entre sus principales inversores con Mubadala, un fondo soberano emiratí.
Está previsto que los vuelos en Emiratos comiencen en 2026. “Esperamos que la demanda sea fuerte”, añadió Goel. Al mismo tiempo se iniciarán vuelos en Nueva Delhi, Bombay y Bangalore, indicó el director comercial, que describió India como “un mercado muy, muy importante para nosotros”.
Actualmente se realizan vuelos de prueba del Midnight de Archer en California, y la empresa rival Joby efectuó sus primeros vuelos experimentales en Nueva York.
UN PASAJE EN LOS TAXIS VOLADORES COSTARÍA ENTRE CUATRO Y CINCO DÓLARES
El Midnight tiene una docena de hélices alimentadas independientemente para minimizar el riesgo de avería, y un ala que le permite planear si falla el motor. Se recarga en seis o siete minutos y tiene una autonomía de 160 kilómetros a una velocidad de 240 kilómetros por hora.
Los vuelos costarían inicialmente entre cuatro y cinco dólares por pasajero y kilómetro (85 pesos aproximadamente), antes de reducirse a la mitad en dos o tres años, explicó Goel, insistiendo en su aspecto “sostenible y respetuoso con el medioambiente”, además de silencioso.
Hace años, surgió la noticia de un estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) que intentó titularse con una tesis en la que proponía autos voladores, impulsados por una gravedad repulsiva que era producida por un mecanismo que giraba muy rápido, pero la tesis estaba bastante errada. La propuesta para que estos taxis vuelen recae en las docenas de hélices escondidas balo la carrocería, a fin de ahorrar espacio, amortiguar el sonido y aportar mayor seguridad. N
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