Después de 72 días de recorrer más de 150 municipios, 16 alcaldías de la Ciudad de México y 32 entidades federativas, este sábado 26 de agosto el aspirante a la candidatura presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia, Ricardo Monreal Ávila, cerró su campaña en la Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco, Ciudad de México, acompañado de su familia y decenas de simpatizantes.
Al grito de “¡Es un honor estar con el doctor!”, lanzado por los asistentes, Monreal afirmó estar en resistencia pese a una campaña desigual dentro del partido Morena.
“Que esta plaza sea testigo de nuestra lucha porque también estamos en resistencia. Esta lucha que ha sido llena de adversidades, que navegamos y nadamos a contracorriente; que asistimos a una campaña interna dispar, inequitativa”,dijo Ricardo Monreal.
“Ni nos doblaron ni nos quebraron, ni nos vamos a rajar”, aseveró arriba del escenario, donde también se encontraba su esposa, María de Jesús Pérez, y sus hijos, Eldaa Catalina, María de Jesús y Ricardo Monreal Pérez.
La sobriedad caracterizó la gira de Monreal. El último día de campaña, en la icónica Plaza de las Tres Culturas, pletórica de colores, vistió un traje color negro. El saco no se lo quitó pese al sol que le daba de frente en el estrado.
RICARDO MONREAL SE SIENTE SEGURO
En punto de las 16:00 horas, el también coordinador de Morena en el Senado presumió ser el aspirante con mayor experiencia política, en contraste con las demás figuras —también denominadas corcholatas—. En palabras del funcionario, en 43 años de vida pública no ha tenido ninguna acusación.
Además, indicó estar logrando el segundo nivel de la Cuarta Transformación y que, como líder en el Senado, “cumplió su responsabilidad: casi 40 reformas constitucionales, 60 nuevas leyes, 140 instrumentos internaciones que fijan las bases de la 4T”.
“No he ido nunca a un citatorio del Ministerio Público; ha sido limpia mi vida. No tengo una sola falta en el ejercicio de la función pública. Soy un hombre limpio, listo para servir a mi país”, dijo.
Un día antes del cierre de la gira, a Monreal se le vio en Ciudad Universitaria. No en un acto de campaña, sino en la Facultad de Derecho, en donde imparte cátedra. La clase de ese día versó sobre el parlamentarismo y presidencialismo, un recorrido por los sistemas de gobierno en el mundo.
Tras hacer un llamado a la unidad, en su discurso frente a la militancia el senador Ricardo Monreal expuso que aguardará el resultado de la encuesta interna del partido guinda para definir quién encabezará la Coordinación Nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación.
“DESEO QUE LA UNIDAD PREVALEZCA”
Desde esta plaza, a la cual definió como “símbolo de resistencia”, adelantó que en los próximos días “se va a guardar con recato” y esperará la decisión de la mayoría de la población.
“Deseo que la unidad prevalezca por encima de todo. Me preocupa la división, la deserción o la ruptura. No nos podemos dar ese lujo en momentos claves de la república. Cerramos filas para consolidar el proceso de transición política. Cerramos filas porque México no puede retroceder ante el poder conservador, ante el conservadurismo”, comentó.
Al igual que otros aspirantes a la presidencia de México, Ricardo Monreal aprovecha el potencial de las redes sociales. Sin embargo, en lugar de presentar clips graciosos, de baile o divertidos, aprovecha las plataformas para difundir su ideario, para compartir sus reflexiones políticas. Sobriedad en su máxima expresión.
Entre las propuestas del coordinador de Morena en el Senado figuran el tema de seguridad, justicia, salud, apoyo a pequeñas y medianas empresas, las mujeres, la educación y el campo. Sobre este último, promete recomponer las cadenas productivas, fortalecer a los productores, atacar el acaparamiento y monopolios de productos agropecuarios, así como preparar a las personas para el proceso de globalización.
“El campo mexicano merece más atención del gobierno. Los campesinos, los ganaderos, los productores, los pescadores, los citricultores, los horticultores, los productores de maíz, de frijol y trigo demandan más apoyo de su gobierno”.
UN MOVIMIENTO EN RESISTENCIA
En 1998, luego de que el PRI le negara la candidatura al gobierno de su natal Zacatecas, rompió con su militancia de 23 años y, vía el PRD, ganó las elecciones y se convirtió en gobernador de su estado. Tras concluir su mandato, en 2004, transitó por varios cargos públicos abanderado por el PRD, el PT, Movimiento Ciudadano y Morena.
En su cierre de gira, su discurso es multicolor y enarbola varias propuestas. Desde el estrado dice que su movimiento está en resistencia y denuncia que ha habido una campaña inequitativa. También aprovecha los micrófonos para hacer un recuento de su labor como senador de la república. Al mismo tiempo, dice que la gente quiere más democracia y destaca las reformas y avances del presidente López Obrador.
Monreal también declara que, en sus recorridos por el país, el 80 por ciento de las personas se han quejado de la inseguridad. Y mientras hace un recuento de lo que al país le hace falta, adelanta que encabezará un frente para reforzar el sistema de salud y atender los reclamos de los maestros para mejorar la educación.
Finalmente, y al grito de “¡Viva México!”, anunció que entregó un plan completo para recuperar la tranquilidad y seguridad en el país, el cual presentó en el Colegio de México. Ante ese mensaje, detalló que falta coordinación, labores de inteligencia, apoyo presupuestario, política de prevención y atención a las causas.
“No apaguen la llama de la esperanza”, espetó con mucho furor. Y sus simpatizantes le respondieron con gritos más fuertes. “Me comprometo a actuar con responsabilidad… no vamos a quebrantar los principios y valores”, añadió en el cénit de su discurso. Posteriormente, pidió cerrar filas en torno al presidente AMLO. “Vamos a seguir luchando”, concluyó. N
