El Municipio de Jesús María buscará incrementar el número de separos dentro de las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, para que sean destinados a aquellos menores de edad que sean detenidos por haber cometido alguna falta administrativa, esto, a raíz del nuevo Reglamento de Justicia Cívica.
El presidente municipal, Antonio Arámbula López, comentó que a partir de esta modificación, se vieron en la necesidad de nombrar a un nuevo director de juicios cívicos, a fin de que el personal esté preparado para implementar las sanciones establecidas en el reglamento.
“Acabo de nombrar a un nuevo director de juicios cívicos para que implemente este nuevo reglamento, tenemos 120 días para aplicarlo, lo primero es que ya hablamos con el Poder Judicial para que se capacite a los jueces en este nuevo reglamento”.
Además, informó que ya se está trabajando para adecuar celdas especiales para menores de edad que sean detenidos por cometer alguna falta administrativa. Los jóvenes estarán resguardados en los separos, mientras se localiza a sus padres y se solicita el apoyo de un trabajador social.
“Vamos a adecuar las instalaciones de las celdas para que haya separos especiales para menores, vamos a tener un lugar especial para menores niños, un lugar para menores niñas, para gente con capacidades especiales, para que no sea una celda sino un lugar donde se le pueda platicar e intervenir con un trabajador social”.
El alcalde indicó que, para llevar a cabo esta readecuación, el Ayuntamiento de Jesús María tendrá que invertir varios millones de pesos, con los que no cuenta en este momento. Sin embargo, afirmó que buscarán una vía que les permita obtener este recurso.
De la misma manera, agregó que se llevará a cabo la contratación de más jueces cívicos, para que la Secretaría de Seguridad cuente con un total de once.
Cabe recordar que el Reglamento de Justicia Cívica y Faltas Administrativas fue avalado por los regidores de Jesús María el pasado 13 de abril. El alcalde explicó en su momento que el objetivo de este documento era eliminar la impunidad de las faltas administrativas entre los jóvenes y adultos.
El reglamento contempla más de cien acciones consideradas como faltas administrativas, como las riñas, insultos, amenazas, la celebración de eventos sin permisos, el daño a las cosas, entre otros.
Los detenidos por estas causas podrán permanecer varias horas en prisión, pagar multas o permutar su falta con servicio comunitario.