La organización ciudadana Guardabosques de Los Cobos, que voluntariamente vigila y protege dicha reserva natural, denuncia que descubrió en flagrancia a camiones de la empresa inmobiliaria Grupo San Cristóbal trazando un amplio camino y desmontando la zona para permitir el tránsito de maquinaria pesada, cuya finalidad era la de transportar y depositar residuos de sus procesos de construcción en la confluencia de dos cañadas establecidas como Área Prioritaria para la Conservación.
De acuerdo a Miguel Vázquez, miembro de los guardabosques, los propios trabajadores de la constructora les hicieron saber que tenían la indicación de “bajar” aproximadamente 250 camiones con varios materiales como despalme, tepetate, entre otros de desconocida procedencia, por lo que de inmediato se contactó a las autoridades correspondientes para impedir que se continuara con el ilícito.
Sin embargo, además de lo que se desechó, se alcanzó a trazar un tramo de aproximadamente kilómetro y medio de norte a sur, específicamente en un predio intermedio entre el área protegida estatal (al sur), la municipal (al norte) y el arroyo resguardado por el gobierno federal, causando daño a la flora y paisaje del lugar. Cabe mencionar que se vertieron residuos en una cañada que tributa agua del temporal de lluvias al arroyo.
Si bien la inmobiliaria ya no continuó tirando sus desechos en la zona afectada, el camino trazado vuelve susceptible al Bosque de Cobos, pues ahora será más accesible el paso para vehículos de automotor y maquinaria pesada, lo abre paso a que se constituyan los delitos de deforestación y desmonte ilegal.
“Parte de lo que se desmontó de vegetación, donde se incluían huizaches, mezquites, gatuño, nopalera, biznagas, la maquinaria la arrojó a la cañada que es parte del sistema del Arroyo Cobos, entonces hubo un impacto a un área federal” señala Miguel Vázquez.
El complejo residencial Lunaria, de Grupo San Cristóbal, es colindante con el Bosque de Cobos, por lo que se cree que el veloz proceso constructivo del fraccionamiento ha incentivado este tipo de prácticas, en las que urge deshacerse de los residuos generados.
El grupo de guardabosques cuestiona el actuar de las autoridades, pues además de que se siguen otorgando permisos a la empresa a pesar de sus irregulares procesos, no se ha castigado a los responsables, por lo que exhorta a las autoridades a asumir a cabalidad su responsabilidad en la salvaguarda integral del Bosque de Los Cobos y no propiciar impunidad.
Cabe recordar que este sitio además de estar protegido por los gobiernos federal, estatal y municipal, también lo está por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, pues cuenta con elementos de origen arqueológico y cultural de cien a doce mil años de antigüedad, como fósiles y contextos biológicos, que en constantes ocasiones se han visto amenazados por el asedio de las empresas inmobiliarias.