Aunque las autoridades sanitarias federales han insistido en que el uso del cubrebocas no garantiza una protección del 100% para evitar la propagación del Covid-19, el 83.4% de los mexicanos consideran que su uso es efectivo o muy efectivo para prevenir los contagios, según los datos más recientes de la Encuesta de Seguimiento de los Efectos del Covid-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos “Encovid-19”, elaborada por el Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (EQUIDE) de la Universidad Iberoamericana.

Sin embargo, cabe destacar que a pesar de considerar que el uso del cubrebocas puede resultar efectivo para evitar la propagación del virus, son menos los mexicanos que lo usan la mayor parte del tiempo que tienen actividades al exterior de sus domicilios, pues sólo 78.6% lo hace.

En contraparte, el 6.9% de los mexicanos lo hacen rara vez o nunca, y por lo tanto podrían estar más expuestos a un contagio.

Por otra parte, la encuesta indica que conforme han ido aumentando los casos de Covid-19 en el país, más preocupación se genera en la población de ser infectados, pues la cifra de la preocupación alta pasó del 49.8% al 60.4% de abril a julio.

Lo anterior, ha provocado que la salud mental de los mexicanos también se vea afectada, tanto en los que han resultado positivos al virus como en los que no han resultado contagiados.

Entre abril y julio se observó que más del 30% de la población mexicana ha manifestado síntomas severos de ansiedad.

En este sentido, los habitantes de poblaciones en niveles socioeconómicos bajos han sido los más afectados, ya que por ejemplo, el 35.2% de la población en nivel bajo (D y E) expresó tener síntomas severos de ansiedad. Por el contrario, las personas que pertenecen al nivel socioeconómico alto (A, B y C+) reportaron un 24.5% de incidencia.

Ligado a la ansiedad se encuentra la depresión, aunque en esta problemática se ha detectado un leve decremento de abril a junio, cuando se pasó del 27.6% al 23.0%.

En este tema, las personas que forman parte de zonas de nivel socioeconómico bajo también han sido las más afectadas, al no contar con accesibilidad a servicios de atención psicológica.

Aumentan empleos en julio, aunque la mayoría en la informalidad

La Encovid-19 también incluye un apartado sobre la economía y el bienestar en las familias mexicanas a partir de la contingencia sanitaria del nuevo coronavirus.

Al respecto, se indica que tras la recuperación gradual de las actividades económicas, productivas y sociales en las entidades, la generación de empleo se ha comenzado a reactivar, principalmente en el sector informal.

Durante mayo, México registró su mayor nivel de desocupación (personas desempleadas, descansadas o imposibilitadas para salir a buscar trabajo) con un 14.6%; posteriormente en junio la desocupación se redujo a 10.3% y en julio a 8.3%, lo que significa que ha habido una franca recuperación en la generación de empleos en los últimos dos meses.

No obstante, la mayor recuperación laboral se ha dado en el sector informal, en donde la desocupación disminuyó de 18.4% a 8.9% entre mayo y julio, mientras que en el sector informal se pasó de 10.3% a 7.5% en el mismo periodo.

El informe añade que el 27.2% de los hogares de México reportaron que alguno de sus integrantes perdieron su empleo, pero sólo el 7.3% se registraron en junio.

De igual forma, aproximadamente en 1 de cada 3 hogares se tuvo una reducción del 50% o más en los ingresos: 31.5% en junio y 30.5% en julio.

La encuesta además está soportada por diversos organismos y asociaciones civiles como la UNICEF México, Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, entre otros.

Los levantamientos de la encuesta se realizaron del 5 al 17 de junio y del 8 al 17 de julio a través de cuestionarios telefónicos.