La nueva administración federal, considera Gerardo Murray, directivo de IHG, sabe perfectamente qué es lo importante para que el país siga posicionándose y creciendo en materia de turismo.
InterContinental Hotels Group (IHG), la compañía británica que nació en 2003, hoy en día es considerada la mayor operadora de marcas de hoteles a escala mundial, pues administra 5,500 hoteles, lo que se traduce en 826,000 habitaciones distribuidas a lo largo de más de cien países.
En esta organización global se reúne una amplia cartera de marcas hoteleras, entre las cuales se cuenta con Regent Hotels & Resorts, InterContinental® Hotels & Resorts, Kimpton® Hotels & Restaurants, Hotel Indigo®, EVEN® Hotels, HUALUXE® Hotels and Resorts, Crowne Plaza® Hotels & Resorts, voco™ Hotels, Holiday Inn®, Holiday Inn Express®, Holiday Inn Club Vacations®, Holiday Inn Resort®, avid® hotels, Staybridge Suites® y Candlewood Suites®.
La accionista mayoritaria del grupo es InterContinental Hoteles Group PLC, la cual está constituida en Gran Bretaña. En los hoteles IHG y sus oficinas corporativas a escala global trabajan más de 375,000 personas.
“En el grupo buscamos llegar a esos lugares donde sabemos y hemos detectado que nuestra clientela tiene la necesidad de contar con un hotel de primer nivel y de una marca reconocida, y obviamente nuestro plan de desarrollo se enfoca en eso”, explica Gerardo Murray, vicepresidente Comercial, Mercadeo y Estrategia de Negocios, México, América Latina y el Caribe de IHG.
“Nuestro plan de crecimiento está muy enfocado en llevar la marca correcta al lugar correcto. Algo que caracteriza a IHG es su gama muy grande de marcas, la cual nos permite atender un nicho de mercado distinto en cada sitio”, añade en entrevista con Newsweek México.
Desde el viajero que busca una experiencia sofisticada y con beneficios complementarios propios de las diferentes marcas de gran variedad y de lujo, hasta el que exige una alta relación valor precio, todos los clientes cuentan con opciones en la cadena IHG, expone el directivo:
“Incluso, en nuestro catálogo de marcas hemos desarrollado opciones para el viajero que tiene estadías muy prolongadas o que tiene la necesidad de estar lejos de casa. Estas ofrecen experiencias muy diferentes a las de un hotel tradicional, como cocinas completas para que pueda cocinar, lavandería, clósets grandes, baños muy completos, salas amplias, etcétera. Precisamente esa es la parte estratégica de IHG, contar con una marca para cada ocasión y para cada perfil de viajero”.
—¿Cómo construyen estos conceptos de alojamiento que atiende a viajeros tan distintos?
—Hay un plan estratégico de desarrollo. En el área de franquicias, antes de que el franquiciatario abra un hotel, lo que hacemos es asegurar, a través de un estudio del perfil de la plaza, el tipo de estadía: la permanencia promedio, los competidores, los centros y la naturalidad del negocio. Es decir, hacemos un estudio y le sugerimos al franquiciatario cuál es la marca más adecuada para ese mercado. Obviamente teniendo en mente que queremos que sea un hotel exitoso y que tenga un pronto retorno de la inversión.
—¿Este tipo de inversiones cómo coadyuvan a las economías locales?
—Durante la construcción creamos muchísimos empleos indirectos, y una vez que arranca, los empleos directos e indirectos generan la operación misma de la unidad de negocios. Algo importante también son los programas alternos que tenemos para el desarrollo del talento, contamos con uno que se llama Academia IHG, que se alía con instituciones educativas para desarrollar al personal, pero no solo en la práctica, sino como una materia de unidad de negocios. De este modo aseguramos que las habilidades y capacidades del individuo sean desarrolladas completamente y, al final, la mayoría termina con trabajo asegurado.
—¿A este tipo de diferencias qué otros se suman respecto a su competencia?
—Este tipo de programas nos hacen muy diferentes porque, así como tenemos este, enfocado en la generación de talento, tenemos otros dirigidos al cuidado y sensibilización del medioambiente. Desde el inicio acompañamos al franquiciatario para que su inversión sea realizada de manera que obtenga ahorros en el consumo de agua, tratamiento de estas, manejo de desperdicios, de manera tal que el impacto ambiental sea de nulo a menor. Creo que esa es una parte crítica, la sensibilización y responsabilidad social que tenemos con la plaza a la que llegamos.
En otro orden de ideas, Gerardo Murray opina que el gobierno federal que recientemente tomó posesión en México no es ajeno a la oportunidad que tiene el país en materia de turismo, inciso que concierne directamente a las cadenas hoteleras. En este sentido, considera que la nueva administración sabe perfectamente qué es lo importante para que un país como México siga posicionándose y creciendo.
“La cabeza del turismo [Miguel Torruco Marqués] es una persona que viene de nuestras filas. Creo que tener a alguien con esa experiencia en un puesto tan crítico como ese es algo que, para nosotros, los prestadores de servicios, es una gran ventaja porque tenemos a alguien que está enfocado”, considera.
—La industria hotelera es inherente al desarrollo del turismo. ¿Cuáles considera que son los principales retos?
—El turismo para México es, sin lugar a duda, uno de los detonantes más importantes. Un ejemplo es cómo hemos escalado a lo largo de los últimos años en nuestro nivel de captación de turistas. A escala mundial, pasamos de ocupar la posición 13 a la 10, luego a la 8, y si no me equivoco, este año cerramos en el 6° lugar. El mensaje que eso manda es que México sigue consolidándose como uno de los destinos más atractivos para el turismo. ¿Por qué? Porque tiene todo: playa, cultura, biodiversidad, turismo religioso, pero también hemos generado turismo médico o de negocios, y ese es el principal factor positivo, somos un país rico en diversidad económica.
“¿Entonces cuáles son los principales desafíos? Seguir posicionándonos en el mundo. El gran reto está en que todos los prestadores de servicios sigamos haciendo lo mejor, sigamos profesionalizándonos y trabajando de la mano con los gobiernos federal, estatal y local para que todas las entidades vean el beneficio, cualquiera que sea la vocación de ese turismo”.
—Y tampoco podemos dejar pasar el reto de la inseguridad…
—Correcto. Sin lugar a dudas, el principal enfoque de todos los prestadores de turismo formal es la alianza que podamos generar con los organismos locales, estatales y federales para trabajar de la mano y ejercer la presión que se tenga que ejercer, pues cualquier mala imagen que nosotros mandemos lamentablemente se replica, y eso nos pone en una desventaja. En lo que nos concierne, hay que educar a la gente que presta un servicio en cómo manejar la identidad del huésped de una manera más confidencial, más segura, con mayor fidelidad, y seguir colaborando con los organismos que hacen su trabajo localmente.