Paul Polman, CEO global de la empresa multinacional Unilever, asegura que invertir en México reditúa al doble.
En un momento en el que los consumidores obligan a las empresas a adaptarse a cambios y modelos de negocio más simples y sustentables, Unilever, la multinacional británico-neerlandesa que cuenta con 400 marcas reconocidas en todo el orbe, se adapta a las necesidades del mundo proponiendo un modelo de negocio sustentable que ve por el bien del planeta y de quienes en él habitan.
Paul Polman, CEO global de Unilever —conformada por marcas como Axe, Dove, Hellmanns, Knorr, Rexona, Sedal, Ponds, Holanda, Zest y Ego—, habla con Newsweek en Español sobre la evolución de la compañía bajo su dirección, el salto hacia modelos sustentables y el mercado mexicano como parte importante del crecimiento de Unilever en América Latina.
—¿Cómo ha evolucionado la compañía desde que eres CEO?
—No sé si sea desde que estoy yo ahí, pero lo que es seguro es que la compañía ha movido sus números de 38 billones a 55 billones. Tenemos un portafolio cada vez más fuerte y nuestro negocio está muy bien posicionado en el mercado emergente. El 90 por ciento de nuestras marcas están en los puestos uno o dos de acuerdo con su giro. Estamos muy contentos porque en diez años hemos mostrado que tenemos un modelo de negocio que es bueno para todos nuestros actores económicos, nos hemos movido rápidamente a fuentes sustentables, y hemos alcanzado al menos a 600 millones de personas, a quienes mejoramos sus hogares y su salud como parte de programas como “handwashing” y por medio de la creación de empleos.
“Además, tenemos un modelo de negocio que es bueno para la sociedad, y como resultado hemos visto subir la reputación de Unilever. También nos acabamos de convertir en el primer lugar en el Índice Dow Jones de sustentabilidad”.
—¿Por qué es tan importante México para Unilever?
—Siempre hemos priorizado el mercado mexicano. Tenemos a 800,000 personas trabajando para nosotros, así como cuatro fabricas grandes. Hemos invertido 1.5 billones de dólares en los últimos cinco años en México y nuestro negocio ha crecido al doble. México es un enorme país en términos de crecimiento, para Unilever está dentro de los diez países con mayor crecimiento y en el que vemos que existen muchas oportunidades. También es un ejemplo para América Latina porque hay que marcar muchos estándares en esta región y México, en muchos aspectos, ya los está marcando.
—¿De qué manera?
—Es una organización que tiene equidad de género en sus puestos, algo difícil de hacer en América Latina. En México la organización es diversa y muy cercana a los consumidores de nuestras marcas. También marcamos los estándares para la sustentabilidad en México, pues creamos alimentos que son 100 por ciento sustentables (alimentos cuyo modo de producción y consumo no perjudica al medioambiente), incluso reciclamos la misma cantidad de las latas de aluminio que utilizamos. Estamos mostrando, también en México, que los negocios se pueden hacer de formas distintas y ojalá que otros negocios en México comiencen a cambiar.
—¿Qué tan atrasado está México en temas de sustentabilidad y cuidado del medioambiente?
—México necesita trabajar en algunas áreas. El Banco Mundial cree que con las proyecciones actuales de cambio climático, 100 millones de personas regresarán a la pobreza, eso sería una pena y no deberíamos de permitirlo. México necesita mejorar áreas como creación de trabajo, productividad, sustentabilidad y corrupción. Nosotros queremos trabajar con el nuevo gobierno para ser parte de la solución y no del problema.
—Hablemos de este modelo de trabajo sustentable…
—Hemos hecho un compromiso para movernos a un modelo de trabajo sustentable porque creemos que no puedes subcontratar tu cadena de valor y, al mismo tiempo, subcontratar tus responsabilidades. Tienes que verlo como un total que incluye todas nuestras marcas y todos nuestros productos, y eso lo hace nuestro modelo único. Dentro de este modelo tenemos 50 metas, entre ellas están que todos nuestros vegetales y frutas vengan de modelos sustentables, crear 5 millones de trabajos para mujeres, crear trabajos para dueños de pequeñas granjas, utilizar solo energía verde y reciclar el plástico en su totalidad.
Unilever sabe que los consumidores quieren compañías que sean responsables y que estén preocupadas por el bien del planeta. Por eso entre sus campañas de transformación han generado un compromiso para que su publicidad en redes sociales sea mucho más responsable y sin estereotipos. Además de que están muy activos en las negociaciones de cambio climático.