Este sábado deja el cargo como embajadora, quien llegó al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) la tarde de un jueves 26 de mayo, para un día después entregar sus copias de estilo de las cartas credenciales a la entonces canciller Claudia Ruiz Massieu.

Durante su arribo a la terminal aérea, y en un breve mensaje a medios declaró que “hay mucho por hacer juntos. Estoy emocionada por comenzar a trabajar con mis colegas en la embajada de Estados Unidos y nuestros nueve consulados alrededor del País, para avanzar en el amplio espectro de metas que nuestras dos naciones comparten”, reportó Notimex.

“No es un adiós, sino un hasta luego. Hoy creo aún más en la fortaleza de la relación MX-US. La relación bilateral continúa y esta cuenta cambiará de nombre a @USAmbMex, cuenta institucional de futuros embajadores en México. Síganme en @Jacobson_RS. ¡Hasta pronto! #MiAmorXMéxico”, escribío al despedirse hoy en la embajada de Estados Unidos en México.

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La mujer que se va con sabor a México, fue esperada por ocho meses tras la salida de Earl Anthony Wayne, sin embargo, el destino y la visión del ex presidente Barack Obama, pusieron por primera vez a una mujer a cargo, desde que en enero de 1899 tomara la responsabilidad Powell Clayton como primer embajador en esta nación por encargo del vigésimo quinto presidente de Estados Unidos, William McKinley.

No llegó tarde, llegó justo a tiempo, e hizo que cada minuto valiera. Roberta Jacobson siempre fue una defensora de la buena relación bilateral entre Estados Unidos y México, como lo dejó en claro desde que entregó sus cartas credenciales ante el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, el 20 de junio de 2016, en Palacio Nacional.

Tras la ceremonia, Jacobson declaró que una sólida relación entre Estados Unidos y México es aquella donde se hace frente a los retos regionales y mundiales de manera conjunta, en temas energéticos, climáticos o en favor de la competitividad, entre otros.

“Una relación en la que nuestros valores compartidos como la reducción de la pobreza, el crecimiento de la clase media, la protección de los derechos básicos, el fortalecimiento del Estado de derecho, la rendición de cuentas por parte del gobierno pesen más que las diferencias que pudiéramos llegar a tener”, dijo en aquella ocasión.

Es así que la hoy ex embajadora fue desempeñando sus funciones, y también realizó giras de trabajo en diversos estados de la república, en donde además de abogar por la relación bilateral, poco a poco se fue enamorando de él.

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Muestra de ello son algunas de sus publicaciones en Twitter, en donde recuerda su visita a Baja California Sur la cual le dio “la oportunidad de conocer más bellezas naturales y tesoros gastronómicos. Las reuniones con estudiantes, sociedad civil, gobierno y empresarios fueron enriquecedoras. La hospitalidad de todos es destacable”.

O tal es el caso de Oaxaca, “tierra de alebrijes, textiles y mezcal, de sueños y de sabores. Me sentí abrazada por tu esencia colonial y el candor de tu gente. Deseo que tus impresionantes bellezas naturales traigan a tu pueblo la prosperidad que merece”.

Sin embargo, su estancia en México también se vio enmarcada en la tragedia, durante los sismos de septiembre pasado, que afectaron diversos estados de nuestro país.

A las 11 de la noche con 49 minutos del 7 de septiembre de 2017 se registró un terremoto de 8.2 grados de magnitud, que afectó principalmente a Chiapas y Oaxaca.

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Al respecto comentó en su cuenta de Twitter “Es el primer temblor fuerte que siento en #CDMX. Nuestras oraciones están con las familias afectadas, especialmente en Oaxaca y Chiapas”.

Un par de días después, visitó las instalaciones de la Cruz Roja en la capital del país, en donde también entregó un donativo para las comunidades afectadas, e incluso menciona “Cola de ciudadanos donantes y muy impresionada con los voluntarios”.

Para la conmemoración de la independencia, y después de dicha tragedia, comentó en esa misma red social “#México yo también creo en ti. En tu cultura que me enriquece, y en tu gente que me enamora. ¡Feliz #DíaDeLaIndependencia!”.

Tan solo tres días después, el 19 de septiembre, un nuevo sismo azotaría ahora al centro del país. Ante lo cual expresó su solidaridad con pueblo de México. “Estamos con ustedes. #Fuerza y #resiliencia a familiares y víctimas de #sismo. #PrayForMexico”.

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La embajadora movió todos los recursos a su alcance, y de su mano arribó a la Ciudad de México el Equipo del Condado Los Ángeles Búsqueda y Rescate para ayudar, así como toneladas de equipamiento.

Durante todo ese tiempo, Jacobson informaba a través de Twitter lo que pasaba: “60 socorristas, 62mil libras de equipo, 10 entrenadores y 5 caninos de @LACo_FD, trabajarán junto a expertos de Guadalajara y Tijuana”.

“Recordamos apoyo del pueblo de México durante #HuracánKatrina. En buenas y malas, #EEUU y #México son #vecinos, #aliados y #amigos”, escribía en esos momentos, siempre dejando clara la amistad de ambas naciones.

EL 25 de septiembre la embajadora entregó en las oficinas de la Cruz Roja Mexicana una donación por 100 mil dólares, para apoyar a grupos vulnerables afectados por el dicho sismo.

Roberta Jacobson, madre de dos hijos se mostró orgullosa de su esposo, y el 11 de octubre de 2017 publica en Twitter “Orgullosa de mi marido, Jonathan con ONG CADENA construyendo casas temporales en Jojutla, Morelos. CADENA en Jojutla también trabaja con soldados de SEDENA para ayudar a los damnificados del terremoto.”

Leer: Roberta Jacobson, embajadora de EE. UU. en México deja el cargo y aumenta la tensión bilateral

Sus fotos compartidas a través de dicha red social, demostraron lo enamorada que esta del país que fue testigo de sus últimos años como parte del servicio diplomático del país vecino.

Con cada uno de los tuits que publicó, el apoyo y el amor de sus más de 23 mil seguidores se dejó leer, ya que la diplomática solo recibió mensajes de cariño, respeto, y un profundo agradecimiento por su labor en los dos años que vivió en esta nación.

“A partir de hoy y hasta el momento de mi partida les compartiré lo aprendido, y lo que extrañaré, tras mi andar por este hermoso país. ¡Gracias #México! #MiAmorXMéxico”, fue uno de sus mensajes durante su recta final.

En las decenas de mensajes manifestó que extrañará de México su primavera, los atardeceres, y sus colores, pero sobre todo a la juventud, a la cual se refirió de hermosa, proactiva, y llena de metas e ilusiones.

Deseo el mejor de los éxitos en su lucha por la equidad de género, la justicia e igualdad de oportunidades para las mujeres y futuras líderes de México.

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Y no se olvidó de sus sabores, y resaltó la gran variedad de colores y sabores del mercado de San Juan en la Ciudad de México, así como donde pudo conocer la rica diversidad cultural del país en los mercados de Sonora y la Ciudadela, donde también fue testigo de la labor de los artesanos mexicanos.

Finalmente, y tras el proceso electoral que vive México, Roberta Jacobson aseguró que en Washington no hay nerviosismo ni preocupación por quién gane la Presidencia en este país el próximo 1 de julio, ya que podrá trabajar con cualquier candidato que triunfe.

La embajadora se despidió con un video, donde agradece a México por su trayecto, al que llamó, el mejor trabajo de su vida.

“Aunque me cueste creerlo pronto terminaré mi gestión como embajadora y dejare este asombroso país, Quisiera dejarlos con algunas imágenes que llevaré conmigo para siempre. Visite muchos estados, y tuve el gusto de conocer a miles de mexicanos, la calidez de la gente y la belleza y diversidad de México son impresionantes”, dijo.

“Vivir en México sólo reforzó lo que aprendí después de 30 años de trabajar en la región: en la región tenemos mucho más que nos une -comida, familia, cultura, e historia- que lo que nos divide”.

“Este ha sido el puesto de mi vida. Gracias a todos por la amistad que me han ofrecido, prometo regresar tan pronto sea posible. No es un adiós, sino un hasta que nos volvamos a ver. Y somos más fuertes juntos”.