El expresidente catalán acusado de rebelión por la justicia española, Carles Puigdemont, fue detenido este domingo en Alemania cuando cruzaba la frontera en un automóvil, lo que reactivó las movilizaciones independentistas en España.
Puigdemont “fue arrestado a las 11:19 por una patrulla de la policía de tráfico en Schleswig-Holstein” indicó un vocero a la AFP y confirmó que se encuentra “bajo custodia policial”.
El juez español que instruye la causa contra la cúpula independentista catalana confirmó el viernes el cargo de “rebelión” contra 13 figuras, entre ellas la de Puigdemont, se reactivó la orden de arresto internacional en su contra y se solicitó que autoridades Finlandia colaboraran en su captura.
Sin embargo, Puigdemont dejó el país luego de reunirse con diputados finlandeses y participar en un seminario en la universidad de Helsinki.
De acuerdo con The Guardian, el líder independentista viajaba en un automóvil en el camino de Finlandia a Bélgica cuando fue detenido. “Carles Puigdemont ha sido detenido en Alemania cuando cruzaba desde Dinamarca en su ruta a Bélgica. Ha sido tratado adecuadamente en todo momento y ahora mismo está en una estación de policía”, dijo el oficial de prensa del político según el diario.
Puigdemont podría pasar hasta 25 años en prisión por cargos de rebelión y sedición tras organizar un referéndum no autorizado en España que condujo a una declaración unilateral de independencia en Cataluña.
Miles de personas por Puigdemont
La agencia AFP informó que miles de personas protestan esta tarde en Barcelona tras detención de Puigdemont.
La influyente asociación Asamblea Nacional de Cataluña convocó a sus militantes ante la sede de la Comisión Europea en la capital catalana para protagonizar una marcha hasta el consulado alemán, detalló la agencia.
También los llamados Comités de Defensa de la República, unos grupos autoorganizados más radicales, llamaron a manifestarse en las Ramblas de Barcelona y tres horas más tarde ante la delegación del gobierno español, donde el viernes ya se produjeron choques entre manifestantes y policía.
Ese día, tras anunciarse el encarcelamiento de cinco líderes separatistas y las órdenes de detención europea contra otros seis, estos colectivos llamaron a iniciar un ciclo de movilizaciones al que llaman “primavera catalana” a imagen de las protestas que surgieron en 2011 en varios países árabes.
“Ante esta grave situación tenemos que responder juntos”, instaba la cuenta oficial de Twitter de los CDR llamando a estas protestas bajo el lema “Contra la represión y hacia la República”.
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En Girona, la ciudad de Puigdemont, a 100 km al norte de Barcelona, algunas decenas de independentistas se manifestaron enfrente de la delegación del gobierno español, según las imágenes difundidas por el CDR de ese municipio en Twitter.
Los protestantes se subieron al tejado del edificio, retiraron la bandera de España y pintaron la fachada de amarillo, color que se ha convertido para los independentistas en un símbolo contra la supuesta represión de Madrid, informó un portavoz oficial.
Las protestas del viernes, convocadas tras el procesamiento de la cúpula independentista que impulsó el intento de secesión de octubre, terminaron con un balance de 37 heridos en Barcelona.
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Con información de AFP
