Una inteligencia artificial está creando mundos donde muñecas poseídas y otros seres persiguen a humanos aterrados e impotentes.
¿Te parece espeluznante? Ese es el objetivo.
Las huestes de los programas computarizados para crear relatos de ficción se han visto engrosadas con Shelley, un programa del MIT Media Lab así llamado en honor de Mary Shelley, autora de Frankenstein, el cual utiliza información que ingresan los humanos para escribir cuentos cortos de horror. Desarrollado en MIT por los creadores de Nightmare Machine, que genera imágenes deliberadamente grotescas (haz clic aquí, bajo tu propio riesgo), Shelley aprende de los datos subreddit r/nosleep, donde los usuarios publican sus propios cuentos cortos de horror.
Esta semana, Shelley entró en Twitter para solicitar a los usuarios que le ayudaran a escribir sus historias. “Ella” tuitea una o dos oraciones al inicio de cada nueva historia de horror, y luego pide a los usuarios que respondan con líneas propias. A continuación, Shelley retoma el relato donde se interrumpe el usuario y continúa la historia.
Los resultados son anécdotas cortas como esta, tomada del sitio Web de Shelley:
“Noté la sombra de alguien parado en un rincón de mi cuarto, mirando fijamente. Pensé que mi compañera de dormitorio ya estaba en la cama y decidí cerrar la puerta. Me levanté y caminé hacia la puerta. ‘¿Hola?’, murmuré, suavemente. No hubo respuesta. Mi puerta estaba cerrada, y el corazón palpitaba con fuerza en mi pecho. La puerta se abrió. La sombra de la sala estaba justo frente a mi cara. Me miraba fijamente. No pude moverme. Empecé a gritar y llorar, y no podía despertar”.
O esta otra (con líneas que Shelley generó en negritas):
“Me despertaba a las 4:00 AM y veía a la niña mientras yacía en mi cama, con la cabeza inclinada, mirándome. Sabía que ella estaba sujetándome. Tenía sus manos en mi cuello. Me apretaba cada vez con más fuerza, con furia. Apenas podía respirar… Cuando estaba a punto de perder el sentido, me pareció que su rostro era conocido. ANNABELLE, ¿eres tú? ¿Eres la muñeca de mi hermana? Por Dios, jamás debí tirarla a la basura. Aquella muñeca espantosa tenía un alma, después de todo. Y había regresado para vengarse.¿Qué la poseyó para hacer esto? Yo… le preguntaba si sabía qué diablos estaba pasando”.
En el sitio Web también hay ejemplos resaltados en los que se fusionan dos historias diferentes con el mismoprompt inicial, dependiendo de la respuesta de los usuarios.
Por lo pronto, Shelley no está escribiendo gran cosa por su cuenta. Se parece mucho más al juego “exquisite corpse”, donde cada jugador dibuja una sección de un monstruo en un papel doblado y solo puede ver su sección. Y al desdoblar el papel, todas las partes son coherentes, si hay suerte.
Hay historias que demuestran a todas luces que Shelley sigue aprendiendo, pues se desvían por completo del relato que está desarrollando un usuario humano, o continúan con oraciones que los humanos tienen dificultades para analizar gramaticalmente. Como experimento, respondí a unprompt de Shelley con una línea tomada deFrankenstein. Si bien no era fácil dar seguimiento a mi respuesta, aquel no fue el mejor trabajo de Shelley.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek