El gobernador Omar Fayad Meneses respondió que ningún grupo cultural de la entidad se quedará con la designación del titular de la nueva Secretaría de Cultura.
En redes sociales, miembros de la comunidad artística han cuestionado la posible designación de Olaf Hernández como titular de la dependencia, pues señalan que no tiene perfil para ello.
“Nadie se va a quedar con la Secretaría de Cultura más que el gobierno del estado de Hidalgo y el gobierno la va a controlar, porque es la atribución del gobernador, no de grupos”, afirmó Fayad.
El mandatario aseveró que hay “un interés” en que la dependencia recaiga en algún grupo de cultura en específico, que incluso convocó a una marcha a la que “no fue nadie”.
De acuerdo con el gobernante, Cultura no necesariamente tiene que ser encabezada por un “pintor”, sino por quien entienda de asuntos jurídicos y administrativos, no de arte. Afirmó que aún no tiene la designación.
El mandatario también informó que el gobierno estatal mantiene adeudos con la empresa Operadora Mersi SA de CV, la cual obtuvo contratos por más de 80 millones de pesos menos de tres semanas antes de terminar la administración pasada.
“Estoy revisando en virtud de que hay adeudos con esta empresa, y he pedido que mi gente establezca el contacto necesario para revisar el tema de los contratos y el tema de los adeudos”, dijo.
Mersi, de Ernesto del Blanco, logró 906 millones 818 mil 904 pesos en obras, como Tuzobús y Ciudad del Conocimiento, en la anterior gestión hidalguense.
Sobre la adquisición de vehículos que realizó el Instituto Estatal Electoral (IEE), aunque dijo respetar la acción por tratarse de un ente autónomo, consideró que “la administración del instituto” no tomó en cuenta que mientras “en todos los lugares” anuncian medidas de austeridad, ellos “lanza una compra” de autos, algunos de lujo.
Fayad añadió que la iniciativa para disminuir o retirar las prerrogativas a partidos en años no electorales se encuentra lista: “Es una iniciativa de reforma para el tema de revisión de prerrogativas”.
“Buscamos otro mecanismo que tiene que ver con los porcentajes”, pues para desaparecerlas no es suficiente una reforma estatal, sino enviarla al Congreso de la Unión.