Un joven mexicano fue detenido por las autoridades migratorias de Estados Unidos pese a estar protegido por un decreto del expresidente Barack Obama que impide su deportación, un hecho inédito que plantea dudas sobre el futuro de unos 750,000 inmigrantes que se han acogido al programa DACA (Deferred Action for Childhood Arrivals, en inglés).
Daniel Ramírez Medina, de 23 años, fue arrestado el viernes pasado por agentes migratorios cerca de Seattle luego de que agentes llegaran a su hogar para detener a su padre, que tampoco tiene papeles.
Ramírez llegó a Estados Unidos con sus padres cuando tenía siete años, tramitó el DACA por primera vez en 2014 y lo renovó el 5 de mayo de 2016. Eso permite al joven, que es padre de un niño de tres años nacido en Estados Unidos, residir y trabajar legalmente en el país al menos por dos años más.
Las autoridades migratorias aseguran que Ramírez confesó que es miembro de una pandilla, lo cual puede ser un argumento para negar el DACA a un aplicante. Los abogados de Ramírez, no obstante, afirman que esta confesión fue arrancada a la fuerza por agentes del ICE y que su cliente nunca cometió un crimen y no tiene antecedentes penales.
Carlos Manuel Sada, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, informó que el Gobierno de México ya brinda asistencia legal y consular a Ramírez Medina. “Otorgamos asistencia legal y consular al #Dreamer mexicano detenido en #EUA. El viernes habrá una audiencia sobre demanda para su libertad”, publicó en su cuenta de Twitter.
Mark Rosenbaum, uno de sus abogados del bufete pro-bono Public Counsel, dijo en un comunicado que su arresto es “imprecedente e injustificado y viola las promesas que se le hicieron a él y a otros que obtuvieron el DACA”
El DACA fue creado como una medida temporaria para evitar la deportación de cientos de miles de jóvenes traídos por sus padres a Estados Unidos cuando niños, que han vivido casi toda su vida en el país y están totalmente integrados a la cultura estadounidense.