El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, realizó esta semana las últimas nominaciones que hacían falta en su gabinete, el cual está compuesto principalmente por personajes del mundo de los negocios y de la milicia, cuya principal similitud es su falta de experiencia política, situación que ha causado preocupación entre académicos que ven a la administración de este magnate neoyorquino de 70 años como un “antigobierno”.
“[Trump] se metió a la guerra con el establishment republicano y ahora está jalando a sus nominaciones de dos lugares, del mundo de negocios y de los militares. Fuera de eso es poca gente con experiencia en el gobierno y en el mismo partido. Con excepción de Reince Priebus [jefe de gabinete] y el exgobernador de Texas, Rick Perry [Energía], muchas de esas personas no tienen experiencia política”, explicó en entrevista con Newsweek en Español, Allert Brown, Director Asociado del Instituto de Estudios Latinos de la Universidad de Notre Dame.
Brown comentó que es difícil pensar en este grupo de personas, muchas de los cuales están exactamente en contra de lo que van a hacer como cabezas de agencias gubernamentales. “En ese sentido va a ser un gobierno, antigobierno”, indicó.
Trump ha designado en su grupo de trabajo a hombres de negocios polémicos como Rex Tillerson, quien ocuparía la Secretaría de Estado, presidente ejecutivo de ExxonMobil, señalado por sus estrechas relaciones con el presidente ruso Vladimir Putin, en un contexto en el que Estados Unidos ha apuntado hacia Moscú en el caso de ciberataques que interfirieron durante el pasado proceso electoral.
Otros empresarios que han corrido con la misma suerte son Wilbur Ross, nominado en Comercio, conocido como el “rey de la bancarrota” a raíz de su conocida práctica de adquirir empresas en quiebra de los sectores del acero y el carbón, para venderlas luego logrando importantes beneficios.
También figura la designación de Andrew Puzder en Trabajo, quien como director ejecutivo de la empresa CKE Restaurants y expropietario de las cadenas de comida rápida Carl’s Jr y Hardee’s, se ha opuesto a aumentar el salario mínimo y apoya el uso de la tecnología para ahorrar costos, eliminando empleos.
En el Departamento del Tesoro ha sido nominado el Veterano de Wall Street Steven Munich que fue socio de Goldman Sachs antes de lanzar un fondo de inversión respaldado por George Soros, partidario de los demócratas. Financió películas en Hollywood como “Avatar” y “Escuadrón Suicida”.
Arriba los empresarios Rex Tulleron (izquierda) y Wilbur Ross (derecha); abajo Andrew Puzder (izquierda) y Steven Munich (derecha). Fotos: AFP
Otras designación polémicas han sido las de los militares, John Kelli, en Seguridad Interior, un exmarine, que dirigió el comando del ejército encargado de América Latina; la del general retirado de los Marines James Mattis, en Defensa, conocido por liderar a las tropas estadounidenses en Medio Oriente y el Sureste asiático desde 2010 a 2013, años durante los que se ganó el apodo de “Perro Rabioso”; y la del explosivo general retirado, Michael Flynn, un veterano de las guerras de Irak y Afganistán que será el principal consejero militar de Trump.
Un nombramiento igual de criticado ha sido el de Steve Bannon, una figura clave en la campaña electoral de Trump que se desempeñó como director ejecutivo de la conservadora plataforma de noticias Breitbart, fuente de información favorita del movimiento “alt right”, que promueve una mezcla de populismo, racismo y supremacía blanca.
De igual forma ha sido cuestionada la llegada del Fiscal general del estado de Oklahoma, Scott Pruitt, a la agencia de protección ambiental aún cuando se trata de un escéptico del cambio climático y un defensor de la industria de los combustibles fósiles que pasó mucho tiempo luchando contra la agencia que ahora dirigirá.
Para la doctora en Estudios Políticos por la Universidad de París X-Nanterre e integrante de la Asociación Mexicana de Estudios Internacionales (AMEI), Laura del Alizal Arriaga, el que un mandatario integre a su gabinete gente fuera del entorno de la política “en algunos casos puede darles credibilidad de que están dispuestos a hacer un cambio, pero cuando pensamos en que es el gabinete de los Estados Unidos, la primera potencia en el mundo, el riesgo es enorme”.
“La responsabilidades estadounidenses en el mundo y su influencia en la política internacional hace realmente muy riesgosos que sea gente sin mayor experiencia la que llegue a resolver y enfrentarse a los problemas de ese país”, dijo la investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) en entrevista con este medio.
Arriba los militares James Mattis (izquierda) y John Kelli (derecha); abajo el exgeneral Michael Flynn (izquierda) y Steve Bannon (derecha). Fotos: AFP
En ese sentido, Allert Brown precisó que aunque es necesario entender que el sistema americano es un sistema de pesos y balances, existen dudas con respecto a cuánta oposición va enfrentar Trump por parte del partido que lo abanderó como candidato.
“[Trump] es un presidente totalmente diferente que no observa las mismas normas que han observado los presidentes anteriores. No se comunica con el público en la misma manera que sus antecesores. No tiene la misma relación con la verdad, el señor dice lo que se le ocurre tenga una base en la realidad o no. Y la cuestión es cuánto contrapeso va a haber en su contra”, mencionó.
En ese sentido, Brown señaló que las nominaciones que ha hecho Trump de su gabinete son señales de adonde quiere ir, de ahí elija a un secretario de Trabajo que está en contra de las leyes de salario mínimo o de veamos al frente del medio ambiente, a una persona que a final de cuentas no es solo un magnate del carbón, sino que además es alguien que está en las cortes en contra de la agencia que él va a liderar.
Para Alizal el panorama se complica ya que se espera de Estados Unidos una política congruente y dirigida por expertos, en ese sentido ella considera que Trump va a tratar de dar cumplimiento a muchas de sus promesas de campaña por eso pone enfrente de las cuestiones del medio ambiente a gente afín a sus posturas de negarse a asumir los compromisos internacionales.
Menciona, por ejemplo que en el terreno económico Donald Trump cree que manejar la economía de Estados Unidos es como manejar sus negocios. “No sólo es un empresario que se ha acogido a muchas componendas para evadir sus responsabilidades con empresas en quiebra, sino que tiene un desconocimiento real del manejo de una economía que sigue siendo la locomotora del crecimiento económico mundial”.
Cuestionado sobre si Trump busca dirigir a Estados Unidos como si tratase de una de sus empresas, Brown mencionó que aunque puede que esa sea su idea, para él el problema es cuál es su filosofía. “No sé si necesariamente se utilice en un negocio nombrar a la cabeza de una sección a una persona que esté totalmente en contra de esa parte del negocio”, indicó.