La empresa Ripley, que posee
una cadena de museos,incluyendo uno en Hollywood,
dedicado a los objetos de significado histórico, es ahora la feliz poseedora de
tan emblemática y seductora prenda.
El escenario de la compra
fue Beverly Hills, organizada
por la casa de subastas de Julien el
jueves pasado. Ahí, la prenda de color dorado, bordada con 2 mil 500 cristales,
que lucía Marilyn muy pegada al cuerpo y que en su momento causó el
efecto deseado ya que su tejido la hacía aparecer casi desnuda, alcanzó la suma de 4.8 millones de dólares,
con un precio de salida de entre 2 y 3 millones de dólares.
La noche que pasó a la fama
eterna el vestido dorado fue cuando Marilyn Monroe le cantó, con voz gruesa y
casi en susurros, la anodina tonadita de Cumpleaños feliz al entonces
presidente de Estados Unidos, John F. Kennedy por sus 45 años, en la fiesta que le hicieron en el
Madison Square Garden.
Video: Youtube
La primera vez que el vestido salió a la venta, en
1999, fue comprado por Martin Zweig, un rico hombre de negocios que pagó 1.3
millones de dólares. El récord de ventas para un vestido de Marilyn sigue
siendo de 5.5 millones, y se trata del que vuela a causa del aire impulsado por
una rejilla de ventilación, en una escena de la película La tentación vive arriba, donde
la actriz se trata de cubrir del ventarrón que sale a sus pies, y sólo logra
parcialmente, para regocijo del público.
En la subasta se vendieron otros artículos como un
traje usado por la actriz en la película Con
faldas y a lo loco, que se vendió en 450 mil dólares, y otro de
noche, adjudicado por 125 mil dólares. Por un par de zapatos de Ferragamo se
llegaron a pagar 34 mil dólares.
La mayor parte de los artículos a la venta procedían
de la colección de Lee Strasberg, amigo de Marilyn y su profesor de
interpretación, que heredó todas sus pertenencias.