Meoqui.-Hace dos años, los Rivero, se aventuraron a la siembra de pimiento morrón, un cultivo al que le vieron la alternativa económica por su mercado y precio. La lucha diaria, se hace en una tierra salitrosa que exige cuidado y entrega para la siembra de estas 3 hectáreas.
Lo exótico del cultivo, en este tipo de tierra, que pudiera decirse de poca calidad, se protege con una malla-sombra al 35 por ciento, que favorece el desarrollo de los pimientos verdes, que al madurar toman un color rojo, cuyo mercado es la central de abastos de la capital del estado.
Arturo Rivero hijo, dio a conocer que su padre Arturo y él tomaron la decisión de este cultivo por el precio en el mercado, ya que se los pueden comprar entre los 10 y hasta los 17 pesos el kilo.
Las plántulas las producen ellos mismos, cuidando detalles para poder tener la mayor producción posible, que pudiera llegar aproximadamente a las 3 toneladas por hectárea, favorecidas con riego por goteo a través de cintilla y el uso de insectos benéficos para el control de plagas, por lo que se puede hablar de un producto orgánico.
El pimiento morrón que producen los Rivero, al rendirse es rojo, explicando que todos los morrones nacen y se desarrollan verdes, pero al madurar en la planta toman diferentes colores como son los amarillos, naranjas y los más exóticos, los morados.
La preferencia en la ciudad de Chihuahua son los rojos para las ensaladas y los platillos, a los que da un colorido especial.
En la actualidad, ya casi al final de la cosecha se están levantando unas 40 cajas de 12 kilos cada una, cada tercer día, pero cuando se tiene lo fuerte de la cosecha, se llegan a producir un promedio de 500 cajas en cada corte.
En las 3 hectáreas se pueden realizar 10 cortes a lo largo de la cosecha, por lo que siguen confiando en este producto que le abrió nuevas alternativas a la familia, sobre todo porque el suelo de su terreno ubicado en lo que se conoce como “La Ciénega” no registra una riqueza, por lo que hubieron de buscar oportunidades, que les dio el pimiento morrón.