Con una ceremonia llena de emotividad este miércoles dieron inicio los Juegos Paralímpicos Río 2016 en el estadio Maracaná, con un mensaje de igualdad, voluntad, inspiración, coraje, admiración y pasión por el deporte, que fue representado por los atletas que portaron la antorcha olímpica, quienes en trabajo de equipo realizaron relevos para llevarla hasta el pebetero.
En esta edición de los Juegos participarán más de 4,300 atletas en 22 deportes, incluidos futbol para ciegos, atletismo, rugby y voleibol sentado, natación, esgrima y equitación.
Una de las deportistas que destacó en la ceremonia fue Marcia Malsar, una exatleta que causó furor entre el público al mostrar su fuerza y voluntad para portar la antorcha olímpica, pese a las inclemencias del clima y de su limitación física. La deportista cayó a la mitad de su trayecto, no obstante, la mujer se levantó de nuevo y continúo, el estadio entero se puso de pie y le aplaudió con fervor.
Posteriormente, la antorcha pasó a manos del nadador Clodoaldo Silva, atleta ganador de 13 medallas paralímpicas, que en su recorrido se encontró con unas escaleras inmensas que se convirtieron poco a poco en una megarampa, representando la poca accesibilidad que existe para las personas con discapacidad. Enseguida,el nadador procedió a encender el pebetero.
Otro deportista que verdaderamente asombró al público fueAaron Wheelz, un atleta extremo en silla de ruedas que se lanzó por una gran rampa, voló a través de un aro y cayó en un colchón inflable, provocando una ovación del estadio entero.
Durante la ceremonia, el presidente del Comité Paralímpico Internacional (CPI), Philip Craven, dijo que en esta ocasión se “Verán el verdadero significado del deporte y de la habilidad”.
Por otro lado, en una ocasión histórica, Thomas Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), no asistió a la ceremonia inaugural, explicó que su ausencia fue porque debía acudir al funeral del expresidente alemán Walter Scheel.
Mientras que un ensordecedor abucheo no permitió escuchar las palabras del presidente conservador Michel Temer, quien asumió el poder tras la reciente destitución de la mandataria de izquierda Dilma Rousseff.
Un total de 4.342 deportistas discapacitados de unas 160 delegaciones, incluyendo un equipo de refugiados, desfiló por un Maracaná a reventar. Los nombres de las delegaciones iban en piezas de rompecabezas, que se iban juntando en el medio del escenario para dar forma a un corazón humano, que brilló después en un juego de luces y fuegos artificiales.