Este padecimiento saltó a la
fama en los programas del doctor House; el médico de bastón y tono sarcástico barajaba
con mucha frecuencia el lupus como diagnóstico para sus pacientes que
presentaban cuadros clínicos extraños.
Es
una enfermedad crónica de predisposición genética, que evoluciona por brotes, y
en la que un agente exterior desconocido, químico o biológico, produce una
alteración inmunológica.
Nueve de cada diez afectados son
mujeres en edad fértil. Se ignora qué factor desencadena el proceso. De cierto
se conoce que evitar el sol y una buena alimentación son claves para controlar
el padecimiento. Selena Gomez se retira por un tiempo de los escenarios para
atenderse de este mal, que es la peor de las enfermedades autoinmunes; LES
(lupus eritematoso sistémico).
El
nombre lupus significa ‘lobo’ en latín. La enfermedad adopta el término porque más
de la mitad de los pacientes presentan lesiones enrojecidas en las mejillas y
en la nariz, como si un lobo les hubiera mordido (sin arrancarles el pedazo).
Además
de las escoriaciones en la piel, surgen dolencias en las articulaciones, a
veces acompañadas de fiebre –sin causa aparente– y cansancio. Y las molestias
duelen, pero las que más preocupan a los médicos son las que dañan el sistema
nervioso y el riñón.
Juan
Jiménez-Alonso, jefe del servicio de Medicina Interna del hospital Virgen de
las Nieves, de Granada, señala que varios estudios realizados por él y su
equipo han demostrado que el estrés es factor desencadenante de los brotes. Agrega
que es muy importante que “el médico dedique tiempo para hablar con el enfermo,
informarle del LES sin alarmismos, de forma sensata y humana”.
No
basta la medicación, agrega el especialista, “quienes padecen lupus deben
llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio físico, eliminar los hábitos
tóxicos –alcohol, tabaco, drogas–, y no exponerse a los rayos ultravioleta del
sol”. La protección solar es fundamental en todos, tengan o no manifestaciones
dermatológicas. Sólo así se previenen lesiones cutáneas, y brotes en otras
zonas; articulares (artritis), o serositis (inflamación de la serosa, o
membrana que envuelve los órganos). En muchas ocasiones estas medidas son tan
buenas como un inmunosupresor.
El
lupus afecta a una de cada mil 500 o 2 mil personas; nueve mujeres en edad
fértil y laboral, por cada hombre. En la década de los 60 y 70 se les
recomendaba que evitaran el embarazo porque podían tener afecciones renales o
neurológicas. Se vio que no era cierto.
Las enfermedades autoinmunes se parecen mucho entre
sí, tienen características clínicas comunes, lo que puede hacer que se tarde
hasta seis u ocho años en tener un diagnóstico certero, por eso el lupus se
convirtió en uno de los males preferido del doctor House. Pobre Selena, la debe
estar pasando mal.