Hace
ya varios años, cuando Nemo se hizo famoso en la cinta Buscando a Nemo, los ejemplares del pez payaso (Amphiprioninae)
registraron tal demanda en las tiendas de mascotas que pusieron en peligro su
conservación. Esta vez se trata del pez cirujano azul (Paracanthurus hepatus),
a la que pertenece Dory, la estrella de la más reciente producción de Disney-Pixar,
Buscando a Dory.
Con
estos antecedentes, no es de extrañar que los conservacionistas prevean el peor
de los escenarios en el caso del pez cirujano azul, con una olvidadiza y
entrañable Dory como figura principal.
Karen
Burke da Silva, experta en biodiversidad y conservación de la universidad australiana de
Flinders, además de cofundadora del proyecto de conservación Saving Nemo, explicaba que más de un millón de
peces payaso son capturados cada año en los arrecifes de coral para terminar
sus días en acuarios de particulares; Estados Unidos es el destino de 400,000
de ellos. El pez payaso se ha extinguido localmente en Filipinas y en ciertas
zonas de Tailandia y de Sri Lanka, lamentó Burke da Silva.
Desde
la universidad de Macquarie (Sidney), el ecologista Culum Brown ha advertido de
manera insistente que el Paracanthurus hepatus es ya una especie amenazada por la pesca
ilegal. Agrega que hay que tener en cuenta, además, que el pez cirujano azul
realiza una función de gran relevancia en los arrecifes de coral al comer las
algas, que los limpia y protege
Resulta
paradójico que el efecto resultante es lo opuesto al mensaje ecologista que
llevaba la película de Nemo, en la que se describe el sufrimiento de los peces
dentro de una pecera en el consultorio de un dentista en Sidney, cuando
deberían andar en la inmensidad del océano.
La
fama de Nemo, en terrible combinación con el calentamiento global –con el
correspondiente incremento de la temperatura media y la acidez de las aguas–,
han puesto a los peces payaso y a otras especie en riesgo, así como a los
arrecifes coralinos.
La
actriz Ellen DeGeneres, que pone la voz a Dory en la versión en inglés de la
película, Disney-Pixar y grupos ecologistas se han unido en una campaña
para ayudar a proteger la Gran Barrera de Coral australiana. Al menos.